El método infalible de un concursante de ‘¡Boom!’ para detectar mentiras

El polígrafo de Conchita, al costado del método comprobado de David, elemento del equipo Por los pelos de ¡Esplendor!, parece cosa de la historia analógica de nuestro país. Y es que lo ocurrido este jueves durante el concurso de Antena 3 ha dejado estupefactos a los espectadores. Hasta el mismísimo Juanra Bonet no daba crédito a lo que acababa de ocurrir y, eso que fue él el conejillo de indias del intento.

Tanto es así que el método de David podría convertirse en el procedimiento infalible para detectar mentiras, al menos las que soltó el presentador durante la prueba que le realizó el concursante. Solo utilizó una baraja de cartas, el pulso del humorista y observó los microgestos del rostro de Bonet. El resultado: ¡impresionante!

David adivina en '¡Boom!' cuándo alguien miente

David adivina en '¡Esplendor!' cuándo determinado miente

Atresmedia

“Quien miente u oculta la verdad hace microexpresiones indetectables para el ojo humano. Entonces, yo soy doble en esto y, si quieres, yo te puedo hacer una prueba”, le decía David a Juanra Bonet. “Tenemos todo el tiempo del mundo”, respondía sorprendido. Para ello, el concursante de ¡Esplendor! sacaba una baraja de cartas francesas para utilizarlo durante la prueba.

“Esto no es ilusionismo, es ciencia”, recalcaba el miembro de Por los pelos. David le pedía que seleccionase una carta de la baraja, a posteriori le hacía dos preguntas para calibrar cuándo decía la verdad y cuándo mentía. Y, una vez que captó las microexpresiones del presentador, dio aparición la prueba. Para ello cogió la baraja, la colocó sobre la palma de la mano de Bonet y le tomó el pulso.

David trata de detectar cuándo miente Juanra Bonet en '¡Boom!'

David proxenetismo de detectar cuándo miente Juanra Bonet en '¡Esplendor!'

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Para adivinar cuándo mentía y cuándo decía la verdad, David empezó una retahíla de preguntas, a las que el presentador tenía que objetar con un “sí” o un “no”, o quedarse mirándole en silencio. De este modo, el participante dejó al descubierto todas las veces que Bonet mentía (que fueron la mayoría) llegando a adivinar, gracias a este método comprobado, la carta elegida.

Tras adivinar, la cara de Juanra Bonet era un poema: estaba completamente alucinado y no podía articular palabra siquiera. “Esto normalmente cuando tienes hijos adolescentes, hijas como es mi caso, le digo: cuando traigas tu novio a casa, le haremos el test este”, bromeaba David. 

“Cuando intentas mentir u ocultar la verdad haces microexpresiones involuntarias”, concluía David en presencia de la cara de estupefacción de Bonet, que todavía no había podido recuperar el acento tras la prueba.

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