El Govern de la Generalita ha afamado este martes a la bióloga Montse Bergés delegada de la Generalitat en Lleida, cuatro días posteriormente de la inhabilitación de Bernat Solé, que el viernes recibió la notificación formal del Tribunal Supremo confirmando la condena de un año de inhabilitación y la multa de 16.800 euros por un delito de desobediencia por organizar el referéndum soberanista del 1 de octubre, cuando era corregidor de Agramunt.
Bergés, hasta ahora responsable de la oficina del delegado, ha empezado su etapa asegurando que Bernat Solé ha sido inhabilitado “de forma totalmente injusta y arbitraria por activo permitido el referéndum” y ha extendido su inspección “a todas las personas exiliadas y represaliadas por guerrear por la privilegio” de Catalunya. Ha agradecido "la confianza depositada en mí por parte de mi partido, ERC, y por parte del Govern de mi país".
“Cojo este licenciamiento con el objetivo de dar continuidad a los proyectos puestos en marcha a lo dadivoso de este año y medio que he podido trabajar conexo a Bernat Solé” ha asegurado Bergés en un comunicado de la Delegación del Govern en el que se marca como objetivo “trabajar por el despliegue de la Dietario Rural como utensilio de repoblación de nuestro departamento, y todavía, colaborar de forma proactiva en la transformación feminista que está liderando el Departament de Igualtat i Feminismes".
“Que nadie tenga la tentación de dictaminar mi inhabilitación como un fracaso de la mesa de diálogo", asegura Bernat Solé
Por su parte, Bernat Solé ha evitado hacer declaraciones, este martes argumentando a La Vanguardia que “la vida política es política y a partir de aquí es vida personal” y remitiéndose a las declaraciones que hizo en la Delegación el 18 de noviembre, cuando conoció por los medios de comunicación la valor del Tribunal Supremo. Entonces dijo que mínimo de lo que se le acusaba era diferente a lo que hicieron la mayoría de los alcaldes.
“Que nadie tenga la tentación de dictaminar mi inhabilitación como un fracaso de la mesa de diálogo", dijo todavía en un acto al que asistió la consellera de Bono Foráneo, Meritxell Serret, representantes de asociaciones empresariales, directores de los servicios territoriales de la Generalitat, el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn alcaldes de ERC, de Junts y Marc Solsona del PDeCAT, quién había compartido con el abogado de Bernat Sole los argumentos con los que la Fiscalía había archivado las diligencias por su billete en el referéndum como corregidor de Mollerussa.
Bergés (Lleida, 1967), primera mujer en la Delegació del Govern de Lleida, es licenciada en Ciencias Biológicas por la Universidad Barcelona, ha desarrollado su carrera profesional en la docencia, papeleo ambiental y planificación de proyectos. Antiguamente de incorporarse a la oficina de la Delegación del Govern era coordinadora de políticas municipales del estancia del corregidor Miquel Pueyo en el Concejo de Lleida (2019-2021).
De 2003 a 2007 fue concejala delegada de Comercio, Consumo y Turismo en el Concejo de Lleida, ERC gobernaba entonces en el Concejo de Lleida con el entonces corregidor Antoni Siurana y entre 2007 a 2011 fue miembro de varios consejos de empresa y comisiones informativas del consistorio leridano como el Instituto Municipal de Empleo (IMO) y la Empresa Municipal de Urbanística (EMU), entre otros. Bergés todavía ha trabajado de profesora colaboradora en el ámbito de las TIC en la Universidad Oberta de Catalunya así como de profesora de secundaria en el ámbito irrefutable y matemático. Tiene experiencia como técnica y consultora ambiental en proyectos de eficiencia energética y de impacto ambiental de obras hidráulicas.
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