El nuevo avance de Netflix de Enrique y Meghan de este miércoles ha resuelto el ataque más visible contra la comunidad positivo británica de la docuserie hasta el momento. Según afirma a cámara Meghan Markle, hubo una conspiración para proteger a otros miembros de los Windsor que consistía en atacarla a ella y así desviar la atención.
"Veías como se desarrollaba. Una historia sobre cualquiera en la comunidad aparecía por un minuto y decían: 'Tenemos que hacer que eso desaparezca'. Pero ese espacio en la prensa tenía que ser llenado por otra historia sobre realeza", cuenta mientras se muestran portadas de tabloides con su foto. Esta presunta conspiración se abordará en los capítulos que se estrenan este jueves.
En este avance además hablan dos voces favorables a Markle, como todas las que han escogido los Sussex para su docuserie. Su abogada, Jenny Afia, quien llevó pleitos de Markle contra los tabloides para proteger su intimidad, afirma en el vídeo que "hubo una verdadera combate contra Meghan. Ciertamente he gastado pruebas de que se construyeron informes negativos en Buckingham contra Harry y Meghan para adaptarse a las agendas de otras personas".
Una amiga de la pareja, Lucy Fraser, dice que Meghan "se convirtió en el chivo expiativo de Buckingham. Y así alimentaban historias sobre ella, fueran ciertas o no, para evitar que se publicaran otras historias menos favorables".
Fin de la tregua
En los primeros tres capítulos no hubo ataques a los Windsor, pero los tres siguientes prometen ser explosivos
Este avance se produce tras otro publicado solo unas horas ayer que ya generó un tromba de críticas a la pareja por retornar a arremeter contra la comunidad positivo británica. Es cierto que en la primera entrega de episodios se evidencia un tono mucho más amable para los Windsor, pero parece que esa tregua acaba en estos tres nuevos capítulos. Así, el relato se acercará más a la explosiva entrevista con Oprah Winfrey de 2021.
El príncipe Enrique, en el otro avance, acusa al personal de Buckingham de "estar felices de mentir para proteger a mi hermano, pero nunca estar dispuestos a opinar la verdad para protegernos a nosotros". El hijo de Diana de Gales además afirma en este avance que fueron víctimas de "luz de gas institucional", un tipo de exageración psicológico en la que se hace a cualquiera cuestionar su propia existencia.
En otra exposición del avance, Enrique se pregunta "qué nos habría pasado si no hubiéramos surgido cuando lo hicimos". Y Markle agrega que su "seguridad estaba siendo retirada. Todo el mundo sabía dónde estábamos". "Tenemos que salir de aquí", afirma Enrique en otro momento. Se retraso que esta segunda parte de la docuserie aborde desde la boda en mayo de 2018 hasta más allá de la renuncia en enero de 2020 y parte de su nueva vida en Los Ángeles.
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