Cómo debes cuidar la zona del contorno de ojos en invierno

La zona del contorno de fanales es la más sensible de nuestro cuerpo. Se alcahuetería de una piel mucho más fina si la comparamos con la del resto de nuestra dermis por lo que el tratamiento que debemos aplicar debe ser específico. La zona del contorno de fanales requiere cuidados distintos durante todo el año pero, especialmente, en invierno al ser la zona más propensa a la deshidratación. Las calefacciones, las bajas temperaturas en el exógeno, el frío… provocan que el contorno de fanales sufra más de lo adecuado y que puedan aparecer bolsas, inflamación y sequedad. Para evitarlo, es necesario seguir una rutina de cuidados en el contorno de fanales.







¿Cómo cuidar el contorno de fanales?



Hidrata y nutre la zona del contorno todos los días. Existen productos en el mercado específicos para hidratar la zona por el día y, todavía por la indeterminación, con el fin de eliminar las bolsas y las posibles ojeras antiestéticas. Usa cosméticos que encima de hidratar, favorezcan la formación de colágeno en la zona para evitar, en la medida de lo posible, el daño oxidativo. 





Tanto si eres de las que te maquillas todos los días como si te maquillas esporádicamente, utiliza siempre un contorno para la zona que encima de armonizar el tono no reseque la zona. Por supuesto, tras el maquillaje es obligatorio desmaquillar correctamente toda la zona.





La regla indispensable para el cuidado de la piel: la fotoprotección solar. Usa fotoprotector solar todos los días del año para proteger la zona del contorno de fanales y tu rostro, de los rayos UVA y UVB causantes del envejecimiento prematuro de la piel.





Escoge unas anteojos de sol de calidad con unos filtros adecuados que eviten que penetren los rayos solares en la piel. Las anteojos de sol encima de evitar lesiones oculares protegerán la piel de los posibles daños provocados por el sol. 





Otro de los aspectos más importantes para rejuvenecer la zona y que, en ocasiones, puede acaecer desapercibido es el alivio. Adormilarse ocho horas y de calidad ayudarán a evitar las bolsas y las inflamaciones en la zona.





Al igual que ocurre con el resto de la dermis, nutrir un estilo de vida activo basado en una provisiones equilibrada y la ejercicio de examen físico ayudará a que la piel se vea más saludable e hidratada.



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