Ander Verde tiene 9 abriles y es educando del colegio de Vallcebre, al sur del Cadí- Moixeró. Estos días en su clase juegan a un conjunto específico que les muestra cómo ha cambiado el paisaje y los pueblos de cerca de con el objetivo de concienciar sobre los posesiones del cambio climático.
Se prostitución de un conjunto de memoria con fotografías que muestra un mismo oportunidad con imágenes antiguas y actuales. El conjunto es una de las iniciativas del esquema Betula, que pretende crear espacios de interviú y advertencia para analizar los posesiones del cambio climático en el Cadí Moixeró.
Los alumnos lo tienen claro y se quedan con el paisaje del “antiguamente”
Pueblos sin carreteras y paisajes llenos de animales, menos bosque y más campos. En ocasiones, el paisaje del Cadí-Moxeró ha cambiado tanto que algunas imágenes, incluso, cuestan de rebuscar.
Sin secuestro, los alumnos del colegio de Vallcebre saben cómo hacerlo: “Nos fijamos en las formas que hacen las montañas porque son lo único que el hombre no ha podido cambiar”, explica Ander.
La directora del centro, Núria Casals, explica cómo, con un conjunto, los niños toman conciencia de los cambios paisajísticos que hay en su entorno. De hecho, este es el objetivo de la iniciativa, que forma parte del esquema Betula, que estudia los posesiones del cambio financiero y climático en los pueblos del Cadí-Moixeró, un entorno especialmente relajado.
Dos de las piezas del conjunto de Betula, con una imagen flagrante y otra antigua.
La iniciativa inquirir crear espacios de billete en el ámbito del Parc Natural del Cadí-Moixeró para identificar los cambios paisajísticos y culturales relacionados con el manejo de los posibles naturales y del paisaje, y asociados a los cambios socioeconómicos y climáticos que ha habido en el zona desde mediados del siglo pasado.
Una vez identificados los aspectos que han cambiado más y los que preocupan más a la población, se elaborará una propuesta de actuaciones para hacer afrontarlas.
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