El Senado de Estados Unidos volvió a tumbar este miércoles, como ya hizo en febrero pasado, el plan de ley demócrata que buscaba fijar el derecho al pérdida frente a las legislaciones de prohibición impuestas por los estados republicanos y frente a la anunciada sentencia del Tribunal Supremo contra la doctrina de ámbito federal que venía protegiendo la franco interrupción del inconveniente desde 1973.
El fracaso, por 49 sufragios a patrocinio y 51 en contra, estaba asegurado por los votos republicanos más el del ya acreditado desleal demócrata de derechas que es el senador por Virginia Occidental Joe Manchin: el hombre que ha amargado el mandato al presidente Joe Biden al arruinar sus principales proyectos sociales. La aprobación hubiera requerido 60 votos favorables al texto; es sostener, 11 más de los que el plan cosechó.
Pese a la previsión de mayoría en contra, los dirigentes del clase demócrata en la Cámara Ingreso tenían interés en que los senadores contrarios al derecho al pérdida quedaran retratados frente a una opinión pública que mayoritariamente defiende, según todas las encuestas realizadas en los últimos primaveras, la franco opción de las mujeres.
Faltan seis meses para las elecciones legislativas a medio mandato, en las que se renueva toda la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, y este es un asunto que el partido de Joe Biden quiere, y necesita, explotar a tope.
"Los republicanos tendrán que dejar constancia de si quieren que esta sea la primera reproducción de mujeres estadounidenses con menos franqueza que sus madres”, había dicho la senadora por Washington Patty Murray, miembro del equipo que lidera las filas demócratas en el Senado.
La vicepresidenta del Gobierno y presidenta del Senado, Kamala Harris, acudió a la Cámara Ingreso para desempeñar ese segundo cargo, en señal de la importancia que ella y los suyo conceden al asunto.
Numerosos miembros demócratas de la Cámara de Representantes y sus asistentes marcharon adicionalmente por el Capitolio, ayer de la votación, para gritar a los senadores a que apoyaran el texto.
El plan de ley no sólo buscaba proteger el derecho al pérdida tal cual lo garantizaba hasta ahora la doctrina establecida hace 49 primaveras por el Supremo en el caso Roe vs. Wade; adicionalmente, la nueva norma habría dejado clara la licitud de la interrupción del inconveniente con medicamentos, entre otras novedades, mediante un estatuto federal de obligado cumplimiento para los servicios médicos de todo el país.
Veintiséis estados republicanos tienen a punto leyes que prohíben o restringen al mayor el pérdida
Tal estatuto federal se habría impuesto sobre las leyes que 26 estados republicanos tienen previsto aprobar, o incluso ya en vigor, para prohibir o restringir al mayor el pérdida voluntario.
El plan finalmente derrotado todavía habría combatido la sentencia que cinco de los seis jueces de la mayoría conservadora del Supremo (integrado por un total de nueve magistrados) prevén emitir en los próximos meses, probablemente en junio. El proyecto de este arbitraje fue filtrado la semana pasada por el diario Politico a través de una insólita filtración cuyo contenido el propio tribunal terminó confirmando a las pocas horas.
La pleito del pérdida continúa en Estados Unidos. Y va a más.
El presidente Joe Biden reaccionó con dureza frente a el voto película con que los cincuenta senadores republicanos más el díscolo demócrata Joe Manchin derrotaron la ley de protección del derecho al pérdida: un retiro que "llega en un momento en que los derechos constitucionales de las mujeres están bajo un ataque sin precedentes, contra la voluntad de la mayoría de los estadounidenses", dijo el líder en un comunicado. Biden se refería obviamente a las leyes estatales aprobadas o previstas en 26 estados republicanos para prohibir o restringir el pérdida, así como a la prevista sentencia del Supremo en el mismo sentido.Dura respuesta de Biden
"Los republicanos en el Congreso han optado por interponerse en el camino de los derechos de las estadounidenses a tomar las decisiones más personales sobre sus propios cuerpos, familias y vidas", denunció el presidente en su nota.
El mandatario se dirigió adicionalmente a los electores para que, en las legislativas de noviembre, otorguen a los demócratas una mayoría suficiente para sacar delante, en las dos Cámaras, la ley derrotada este miércoles en el Senado.
"Las salvaguardas que garantizaría la Ley de Protección de la Sanidad de la Mujer son esenciales para el bienestar, la seguridad y el progreso de nuestra nación", afirmó Biden. Y aseguró que él y su equipo no dejarán de "contender para proteger el ataque a la atención reproductiva de las estadounidenses".
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