Poco han tardado en aparecer las dudas entre los empleados de Twitter tras el anuncio de la adquisición de la compañía por parte de Elon Musk. Según parece, el estilo de Musk no va con la filosofía de trabajo que implantó en la red social su fundador, Jack Dorsey, y mantuvo el coetáneo director ejecutor Parag Agrawal. Y la desconfianza es mutua, hasta el punto que Twitter bloqueó la pasada semana el código fuente de la plataforma para evitar sabotajes internos. Esta desidia de compromiso con los gestores de la nueva etapa augura una desbandada en la plantilla de Twitter, que en la contemporaneidad emplea a unas 5.000 personas.
El futuro del propio Agrawal es incierto y hay quien asegura que Musk no lo mantendrá en el organigrama de la compañía y pondrá otro CEO a su gracia. El magnate lleva abriles demostrando que se mueve guiado por impulsos, y no tiene demasiados escrúpulos para tomar decisiones para conseguir sus metas. Hasta ahora su instinto empresarial le ha cubo más alegrías que disgustos, pero esta impulsividad disgusta profundamente a parte de los trabajadores de Twitter. Y no es lo único que no gusta de él.
El debate de la arbitrio de expresión
Temor a que haya mostrador librado para los mensajes de odio
Luego de muchos abriles luchando por restringir el acoso y el contenido ofensivo en la red social, parece que Elon Musk va a brincar al "todo vale" con el comodín de la arbitrio de expresión que tan recurrentemente emplea. Los empleados no quieren que los mensajes de odio y el contenido tóxico pueda difundirse autónomamente por Twitter y están convencidos de que es poco que ocurrirá con el CEO de Tesla al mando.
Según recoge el medio Business Insider, un exejecutivo de la plataforma, que ahora trabaja en otra empresa, asegura que es cada vez más frecuente cobrar llamadas de empleados de Twitter pidiendo trabajo. Tres trabajadores de la red social relatan que entre la plantilla se está hablando abiertamente de desasistir y averiguar un hueco en otras compañías. "Habrá algún tipo de éxodo de aquellos que no le ven con buenos luceros", comenta al medio uno de los trabajadores.
Nueva etapa
Convencimiento de que el clima de trabajo cambiará radicalmente
Hasta ahora Twitter siempre se ha caracterizado por tener entre sus empleados un parada nivel de satisfacción. A la clan le gustaba trabajar en la red social y el nivel de retención de empleados era muy bueno gracias al clima de trabajo. Sin confiscación, bajo el liderazgo de Musk la desbandada es ahora una efectividad plausible.
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