El 8 de junio de 1972, la fotografía de una pupila vietnamita corriendo desnuda con el cuerpo abrasado por el napalm y gritando con desesperación dio la dorso al mundo. La pupila se llamaba Phan Thi Kim Phuc y el autor de la foto, Nick Ut, era un fotoperiodista de la agencia norteamericana Associated Press. La imagen se hizo famosa como ‘La pupila del napalm’.
Por aquel entonces Estados Unidos llevaba casi una plazo implicado en la Refriega del Vietnam, un conflicto que tuvo motivo durante la Refriega Fría y con el que el gobierno estadounidense quería combatir el comunismo en el mundo.
La imagen se tomó posteriormente de un fuego graneado estadounidense en una pueblo al sur de Vietnam y se convirtió en un símbolo de los horrores de la cruzada. En un artículo en The Washington Post, Nick Ut explica que posteriormente de tomar la foto metió a los niños en su camioneta y los llevó a un hospital.
El napalm es un tipo de combustible capaz de derrochar durante un período de tiempo prolongado; por ese motivo, algunos ejércitos lo utilizaron durante el siglo XX para arrasar cultivos y zonas rurales. En contacto con la piel, produce quemaduras muy graves. Kim Phuc estuvo un año hospitalizada.
Luego de difundir la foto, la presión de la opinión pública para destruir con la cruzada fue definitiva y el ejército de Estados Unidos se retiró del Vietnam ese mismo año (aunque los combates continuaron hasta 1975). La fotografía de Nick Ut ganó el Premio Pulitzer, uno de los premios de fotoperiodismo más importantes del mundo.
A lo espacioso de los abriles, Kim Phuc y Nick Ut han poliedro varias conferencias para promover la paz en el mundo. Phuc lidera una fundación que recauda fondos para ayudar a niños y niñas que sufren las consecuencias de la cruzada.
La cruzada que Estados Unidos no consiguió percibir
La Refriega del Vietnam (1955-1975) enfrentó a dos estados cuyos gobiernos representaban ideologías muy diferentes: Vietnam del Boreal era un régimen comunista que tenía como aliados a la Unión Soviética y China, mientras que Vietnam del Sur recibía el apoyo de Estados Unidos y otros países asiáticos como Corea o Filipinas.
El conflicto vietnamita fue una de las consecuencias de la Refriega Fría, un período de tensión que dividió el mundo en dos bloques tras la Segunda Refriega Mundial (1939-1945). Los gobiernos de la Unión Soviética y Estados Unidos, las dos potencias más poderosas del momento, se enfrentaban para expandir su influencia y conseguir aliados internacionales.
Durante abriles, Estados Unidos proporcionó financiación y armas a Vietnam del Sur para combatir el régimen comunista del finalidad. A partir de 1964, asimismo se enviaron tropas y aviones de combate, que bombardearon gran parte del país.
El conflicto en Vietnam provocó un gran desgaste de las tropas norteamericanas, que perdieron a 57.000 soldados. Este fue el principal motivo de la examen a la cruzada entre la población estadounidense. El movimiento pacifista de los abriles 60 y 70 asimismo denunciaba la asesinato de millones de vietnamitas.
El ejército estadounidense fue muy criticado por el uso de agentes químicos durante la cruzada. Adicionalmente del napalm, los aviones asimismo lanzaron gas naranja, un herbicida que elimina la manto vegetal pero asimismo contamina el suelo y se infiltra en el agua y los seres vivos. Como consecuencia, millones de vietnamitas sufrieron enfermedades graves o nacieron con malformaciones.
Fotoperiodismo para concienciar
La foto de Nick Ut es un ejemplo de cómo una imagen puede resumir y transmitir el horror de un conflicto para concienciar a la sociedad y, a veces, presionar a los gobiernos para que actúen.
El fotógrafo húngaro Endre Ernő Friedmann (1913-1954) y la alemana Gerda Taro (1910-1937) eran dos fotoperiodistas que firmaban sus instantáneas como Robert Capa, considerado el primer gran fotógrafo de cruzada de la historia.
Sus fotos del desembarco de Normandía durante la Primera Refriega Mundial (1914-1918) o la célebre instantánea de la asesinato de un miliciano durante la Refriega Civil española (1936-1939) han servido para cuidar en nuestra memoria escenas históricas. Eso sí, hay muchas dudas sobre la identidad del soldado e incluso sobre el hecho de que verdaderamente estuviera siendo cansado.
La fotografía de la inmensa columna de humo provocada por la proyectil de Nagasaki ha servido para construir en el imaginario colectivo el rastrillo que deja una proyectil nuclear. En agosto de 1945, Estados Unidos lanzó dos bombas nucleares sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, que provocaron la asesinato de más de 240.000 personas.
Asimismo, los retratos de personas han servido para poner cara a los conflictos y hacerlos más humanos. La pupila afgana Sharbat Apetito, que fue portada de National Geographic en 1985, pasó a la historia por su intensa inspección a cámara. El fotógrafo Stephen Curry la retrató mientras estaba en un campo de refugiados en Pakistán.
Las fotografías de guerras, crisis y conflictos suelen producir polémica porque muestran realidades muy duras. Kevin Carter ganó el Pulitzer en 1994 por una foto que mostraba a un irreflexivo con desnutrición en Sudán, acechado por un aprovechado a pocos metros. Carter acabó suicidándose por las críticas recibidas, que le acusaban de insensible por no ayudar al irreflexivo, aunque la ingenuidad de la foto era muy distinta.
Otra instantánea controvertida fue la de Aylan Kurdi, un irreflexivo sirio fallecido en la costas de Turquía mientras su clan intentaba huir de la cruzada en 2015. La imagen muestra el cuerpo del pequeño muerto boca debajo sobre la arena: una fotografía para remover conciencias.
Publicar un comentario