Ha sido mojado como Eirene —la diosa griega de la Paz— en clara narración al cese de la hostilidades en Ucrania y será el dispositivo de seguridad más amplio en absoluto diseñado en España. Más de 10.000 policías se desplegarán durante la Cumbre de la OTAN que se celebra en Madrid el 29 y 30 de junio. Durante esas 48 horas, la renta se blindará para convertirse en la ciudad más protegida con un plan eficaz que contempla desde los posibles ciberataques a la protección de las infraestructuras críticas esenciales.
El Ocupación del Interior lleva más de siete meses trabajando, en coordinación con la Oficina de Seguridad de la OTAN y de Presidencia del Gobierno, en el dispositivo que desde el pasado 2 de mayo se encuentra en su escalón preventiva. El 23 de junio, a escasos días que dé el pistoletazo de salida de la cumbre, se activará el plan en una tercera escalón que servirá para concretar los perímetros de seguridad que se establezcan aproximadamente de los puntos esencia de las jornadas. Desde los pabellones de IFEMA —fuera del anillo de la M40— en los que tendrán motivo las reuniones de los líderes de la Alianza, hasta otros enclaves como el Palacio de la Moncloa, donde el presidente Pedro Sánchez mantendrá bilaterales con sus homólogos, pasando por el Aeropuerto de Barajas o Torrejón de Ardoz, donde aterrizarán las delegaciones.
En el dispositivo todavía participarán 1.200 policías municipales
Pero habrá más puntos críticos, ya que la cumbre no se quedará en IFEMA. Para finalizar la primera marcha, Moncloa ha organizado una cena de trabajo Euro Atlántica —ya que estarán invitados los países europeos que aún no forma parte de la OTAN— en el Museo del Prado, que será cerrado durante dos días para asegurar la seguridad de los 40 líderes que se sienten en la mesa.
El perímetro de seguridad que se desplegará aproximadamente del Prado —en pleno centro de Madrid— dificultará la movilidad de los ciudadanos durante esos días. Las autoridades llevan varios días pidiendo paciencia, conscientes de que la vida habitual de los madrileños se verá alterada. Adicionalmente, se ha pedido a las empresas que tengan la sede interiormente de los perímetros de seguridad que permitan teletrabajar a sus empleados.
El día 27 será cuando se active la escalón crítica del plan. Según fuentes de Interior, el dispositivo contará con la presencia de 6.550 agentes de la Policía Doméstico y 2.400 uniformados de la Agente Civil. A ellos se les sumarán 1.200 policías municipales de Madrid. Todos ellos serán coordinados desde un Centro de Coordinación que se habilitará en uno de los pabellones de IFEMA. Ese será el ojo que todo lo ve. Y en su interior se coordinarán las más altas instancias de seguridad, incluido el Centro Doméstico de Inteligencia (CNI) y el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO).
Es precisamente el CITCO quien está realizando informes diarios sobre la más que probable presencia de grupos radicales contrarios a la Alianza Atlántica durante esos días en la renta. Desde Interior admiten la preocupación por la actividad de dichos grupos durante los días señalados, pero confían en el trabajo policial para que se garantice el derecho pacífico a la manifestación. Las mismas fuentes ministeriales señalan que no han observado “ninguna cuestión peculiar” que tuviese que elevar la preocupación en las últimas semanas.
Las autoridades han decidido, por el momento, abastecer el nivel de alerta 4 —aventura suspensión— del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista. Elevarlo supondría fijar el mayor, el nivel 5 de aventura muy suspensión. No obstante, se celebrarán más reuniones en las dos próximas semanas para evaluar la situación y lanzarse si se mantiene de nuevo o se eleva.
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