Pirarse a 280 Km/h inicio debajo y darse la mano con otras dos personas que se unen a otras dos y así, hasta un total de 18 paracaidistas. Dos veces. El récord, cuya iniciativa partió del congregación Fly Warriors y a la que se sumaron Aldo Comas y los demás participantes, es épico; para lograrlo, todos los participantes necesitan admitir a sus espaldas cientos de saltos de instrucción. Comas presume de 7.500 lanzamientos en paracaídas. Tanto le gusta que los invitados a su boda con la actriz Macarena Gómez los recibieron a la vez caídos del bóveda celeste: la pareja llegó en paracaídas.
De martes a viernes estuvieron realizando los ensayos para que el mediador pudiese luego constatar el récord.
Elevándose en la avioneta para su cita con la historia.
“El Head Down es la modalidad más difícil en el mundo del paracaidismo y logramos reunir a 18 personas para completar el segundo récord de esta formación en la historia paracaidismo castellano. En el primero, de 2009, igualmente estuve. Lo bueno de este es que hemos hecho 3 récords nacionales, aunque uno de ellos aún no es oficial”, explica Comas entusiasmado. El récord de España de planeo en plano es de unos 50-60 participantes que caen a 150 Km/h hora. “En Head Down volamos a 280 km/h con una especie de guardabarros para controlar todo el cuerpo mediante movimientos en las piernas. Imagínate”.
Una de las formaciones.
Han establecido un nuevo récord castellano.
La prueba, con el aval de la Liga Española de Paracaidismo, es certificada por un mediador, que comprobará que la existencia –examina el brinco en vídeo– coincide con la configuración que el equipo le propone y ensaya durante los días previos. “En el segundo récord, un secuencial, hicimos dos puntos: nos unimos en una forma, nos soltamos y volvemos a cogernos haciendo otra forma. El año próximo el plan es saltar 25 personas”.
Felices tras la proeza.
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