Los incendios de Salamanca y de Casa de Miravetes, en Extremadura, se encuentran activos y ayer preocupaba la rápida progreso de las llamas a causa del calor y el derrota. En total, ayer ya se habían harto unas 4.000 hectáreas y más o menos de 600 personas habían tenido que ser desalojados de sus casas.
El que se inició en Las Hurdes se extendió a la provincia de Salamanca y el de Casa de Miravetes entró ayer por la tarde en el parque doméstico de Monfragüe. Los dos incendios se encontraban en nivel 2 de peligrosidad, de una escalera que va del 0 al 3.
Las llamas obligan a desalojar a 1.300 habitantes de la sierra de Mijas y 1.000 más podrían serlo en breve
En el caso del de Salamanca, Naturaleza de Castilla y Audaz explicaba que la prioridad es detener la capital del fuego. “Lamentablemente la capital de incendio aún no está controlada”, apuntaba Ricardo Alonso, técnico del Servicio Territorial de Medio Hábitat de Salamanca.
“Monsagro, Guadapero y Morasverdes son las tres localidades salmantinas afectadas que han tenido que ser evacuadas y de momento, no hay peligro de que se desaloje ninguna otra”, explica Alonso.
Aproximadamente 400 vecinos de estos municipios fueron desplazados a diferentes municipios de la zona como Ciudad Rodrigo. “El incendio puede retornar en dirección a Extremadura y ahí sí que puede amenazar de forma muy seria a la zona de Casares de Las Hurdes. Luego, lo que hemos decidido es que mantenemos el dispositivo de posible defecación, pero con un beneficio de respuesta un poquito más ampliado”, indicó José Antonio Navalón, coordinador regional del Infoex.
Navalón, afirmó que “trabajan en la acabamiento del incendio en Las Hurdes nueve unidades del Plan Infoex con ocho camiones, dos helicópteros con personal de tierra, dos aviones anfibios y más de 250 efectivos, entre ellos un centenar de la UME.
Al obturación de esta tirada, la extensión quemada, aproximada, por este fuego estaría entre las 2.000 y 3.000 hectáreas.
En este caso, la única pueblo desalojada es la propia Casas de Miravete
El otro incendio se declaró en torno a las 16 horas del jueves en el municipio de Casas de Miravete y ayer entró al parque doméstico de Monfragüe. “La estimación aproximada es que el fuego ya supera las 1.000 hectáreas, la mayoría fuera del parque”, exponían los responsables del Plan de Lucha Contra Incendios Forestales de Extremadura. De momento se desconoce cuántas hectáreas del parque doméstico se han calcinado. En este caso, y por el momento, la única pueblo desalojada es la propia Casas de Miravete, donde se ubica el frente del fuego. Un municipio en el que normalmente viven unas 80 personas, pero ahora, en época veraniego, la población se había triplicado. Los vecinos evacuados están en el pabellón polideportivo de Almaraz.
Por fortuna, las llamas, que se iniciaron a menos de cinco kilómetros de la central nuclear de Almaraz, no han afectado a ningún de los dos reactores, según el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
Nieves Villar, directora militar de Emergencias, Protección Civil e Interior de Extremadura avisó de que es especialmente preocupante un lado que se dirige en dirección a la pueblo de Jaraicejo, donde residen unas 500 personas, para el cual se inició un “procedimiento de defecación preventiva”.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió ayer prudencia para evitar la proliferación de incendios que asolan parte de la geogonia española y recordó que España se encuentra en un nivel de peligro extremo delante las elevadas temperaturas.
El futuro de estos incendios se vislumbra complicado
El futuro de estos incendios se vislumbra complicado, como reconocía ayer mismo la Grupo de Extremadura. “Con esta temperatura y estos vientos, los incendios están en una capacidad de acabamiento muy compleja”, justificaban los responsables del Plan de Lucha Contra Incendios Forestal de Extremadura.
Por otro banda, 1.000 personas han sido evacuadas preventivamente de Alhaurín el Conspicuo –y se paciencia que 1.000 más lo sean en breve– y 300 más de Alhaurín de la Torre, a causa del incendio que afecta a la sierra de Mijas (Málaga) y que ya ha harto 800 hectáreas.
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