Rezando

No todas las empresas resistieron el covid. La dureza del impacto empresarial del virus ha llevado a alguna, quizás por exceso de deuda, quizás por enfoques muy locales, a no resistir el difícil período y tener que cerrar. Tenemos muchas empresas que han incrementado su velocidad, han entrado en otros mercados y, aunque su deuda es elevada, los bancos han considerado que tienen futuro y les han ayudado en su recuperación.

El trabajo de los bancos ha sido crucial para la supervivencia de muchas empresas y de miles de puestos de trabajo. En estas situaciones hay que entender ir más allá que analizar el oscilación y la cuenta de resultados. Hay empresas que han sobrevivido situaciones que no se habían imaginado que padecerían. Endeudamientos enormes, resultados negativos, largos impagado en los cobros, fallos en los suministros de algunos proveedores que a su vez provocaban fallos en sus ventas. Hay bancos que han sabido ver esto y han apoyado a compañías que volverán a ser fuertes en el futuro. Somos muy críticos con los bancos pero habría que agradecerles su trabajo en estos tiempos complicados.

Somos muy críticos con los bancos, pero muchos han apoyado a empresas en la covid

Parecía que las malas noticiario del covid iban disminuyendo pero de repente el país se incendió y empezamos a ver imágenes de incendios por todas partes. Con los bosques muy secos por la escasez de lluvias y las altas temperaturas los incendios se extienden con gran presteza pasando completamente de los chorritos de agua que les tiraban algunos helicópteros.

Yo no sé qué cambios han adecuado hacer en el más allá en los equipos de ángeles responsables del entorno crematístico y político del mundo. Quizás en el 2020 hicieron un cambio que precipitó los contagios covid, lanzó la conflagración entre Ucrania y Rusia, ahora aquí nos está incendiando el país y ya veremos qué más se les ocurre. Casi seguro que esos ángeles deben decirse que en este entorno la parentela reza más y se porta mejor.

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Una oficina bancaria en Barcelona 

Propias

Tras ocurrírseles el covid y los incendios podría ocurrírseles enviarnos lluvias que produjesen inundaciones enormes, cortes de carreteras y alguna autopista, paros de los aeropuertos, toda una viso de nuevos problemas. Pero la mayoría deben ser buenos ángeles porque algunos empezaron con temas muy duros como la conflagración de Ucrania o el covid. Igualmente estimularon el que se disparase algún volcán e incluso algún movimiento de tierra. Pero los temas más recientes, como las lluvias, son menos duros y más manejables. Seguramente la arribada al otro mundo de muchas personas que tenían una buena grupo y se lo pasaban razonablemente adecuadamente les dirán a los ángeles innovadores agresivos que paren un poco.

Quizás algunos estén planeando alguna brutalidad cuando lancemos en gran masa los coches eléctricos y añadamos tecnología para favorecer la conducción desde el entorno, con autocontroles.

Estamos esperando un par de primaveras para hacer este dispersión y esto es acertado. Vayamos ahorrando para comprárnoslo y rezando para motivar a los ángeles más buenos.

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