La cita era a las 20 horas en la playa del Llané de Cadaqués. En las mismas rocas donde le hicieron una foto al pintor Salvador Dalí, anejo a su clan, cuando tenía 6 primaveras; el mismo puesto donde en 1925 él mismo posó anejo a Federico García Lorca. La cita era para la treintena de artistas que residen todo el año en Cadaqués. No todos pudieron asistir, unos porque huyen los días de decano masificación turística, otros por algún compromiso o porque no pudieron ser localizados, y además hay quien prefiere la invisibilidad. La fotografía recoge a 17 de estos artistas, que acreditan que ese rincón del Cap de Creus sigue siendo un polo de apego, como lo fue en el pasado para los Pichot, Picasso, Dalí, Man Ray, Duchamp o Hamilton.
El poeta Federico Garcia Lorca y el pintor Salvador Dalí, en 1925, fotografiados frente a la casa de los Dalí en el Llané 
En julio se celebró una Nit de l’Art –que se repetirá el 19 de agosto y el 16 de septiembre– en la que abrieron 22 galerías, talleres y espacios de arte. Del 29 de septiembre al 9 de octubre se celebra el Festival Internacional de Fotografía InCadaqués. El Taller Pasadizo Fort ha celebrado la 41 tiraje del concurso internacional de litografía con más de 600 participantes de todo el mundo. Ningún otro municipio de la costa, ningún otro núcleo con tan solo 2.800 habitantes, reúne esa pléyade de pintores, escultores, fotógrafos, performers... con nombre propio.
Koyama, el decano
Miquel Manzano publica una historia del intérprete japonés que reside en Cadaqués desde hace más de 40 primaveras
Nacido en Osaka en 1940, su pintura de tonos grises ha creado un estilo perfectamente reconocible. Tras un paso fugaz por París, llegó a Cadaqués en autostop en 1970 y al mango de pocos primaveras se estableció definitivamente aquí. A sus 82 primaveras, y pese a su reconocida discreción, ha aceptado entrar en esa foto de género y acaba de entrar a la publicación de Koyama. Una vida entre dos océanos , reveladora historia a cargo de Miquel Manzano (Ed. Comanegra).
Koyama, en la sala Patrick g. Domken de Cadaqués.
Gustau Carbó Berthold
Este verano la sala Marges-U celebra su vigésimo aniversario
El padre de Gustau Carbó Berthold era de Cadaqués, aunque él nació en Barcelona en 1941. Formó parte de la “gestación de los 60” con los Llimós, Arranz Espléndido, Artigau, Villà, Bartolozzi, Chancho. Desde 1978 vive en Cadaqués y se ha implicado en diversos proyectos culturales y reivindicativos. Durante casi 10 primaveras fue presidente del Ateneu de Cadaqués. Este año ha realizado el cartel de la Nit dels Museus y celebra los 20 primaveras de la sala Marges-U, que regenta anejo con su mujer, Nobuko Kihira (Nagoya, 1960), una pintora de trazos minimalista, que llegó a Cadaqués para participar en el Mini Print Internacional hace 33 primaveras (concurso que ganó en 1995).
Artistas emergentes
Joaquín Lalanne y Javi Aznárez saltan fronteras
Entre los artistas residentes, el más bisoño es Joaquín Lalanne (Buenos Aires, 1989). Hijo de padres uruguayos, llegó en el 2008 para pintar un mes en el taller de Ignacio Iturria y se quedó. Su hiperrealismo daliniano de inicios ha regalado paso a un estilo propio que juega con el collage pictórico e introduce rudimentos tanto de la civilización clásica como del pop art. Tras exponer en Punta del Este y Miami, ahora expone en la sala Blanco Mora, de Cadaqués, en diálogo con esculturas de Eudald de Juana. Y en la riba d’en Pitxot, otro intérprete revelación, Javi Aznárez (Barcelona, 1979), presenta las ilustraciones que hizo para la película La crónica francesa de Wes Anderson (lo contactó la productora Octavia Peissel, que veranea además en Cadaqués). Se pueden ver en el Taller de Tabakov, que toma su nombre de un misterioso pintor ruso que vivió aquí hace más de cien primaveras. En el taller expone además su mujer, la intérprete francesa Elodie Loiseleur, y hasta hace poco Ilich Roimeser, que hace poco ha dejado el taller y Cadaqués.
Cartel de Javi Aznárez para la película 'La crónica francesa' de Wes Anderson 
El género de los uruguayos
El influjo del pintor Ignacio Iturria
Ignacio Iturria (Montevideo, 1949) es un pintor y magnetófono uruguayo, hijo de emigrantes vascos, que se instaló en Cadaqués en 1977. Ha representado a su país en la Bienal de Venecia y aunque hace pocos primaveras regresó a Uruguay, ha dejado aquí una sala con su nombre, que regenta su yerno Juan Russo (con otra sala del mismo nombre en Madrid). Ha ejercido de mentor de otros artistas, como José Luis Scafo (Montevideo, 1972), cuyas pinturas de un Cadaqués traumatizado por los blancos y la luz son ya una seña comercial, o Miquel Herrera (Montevideo, 1953), uno y otro instalados aquí. Todavía Lalanne morapio aquí por primera vez a través de Iturria. Otro uruguayo que lleva más de vigésimo primaveras con sala en la calle Unió, es Mauricio Sbarbaro (Montevideo, 1960). Lo ha compaginado con talleres en Punta del Este y Barcelona, y ahora está a punto de aclarar otro en Bruselas. “Seguramente un día tendré que cerrar el taller de Cadaqués porque lo querrán arrendar para alojamiento –dice con flato de preocupación–. Cadaqués corre el peligro de masificación, como en Colliure”.
‘Cadaquesencs’
Moisès Tibau, de fotógrafo free tirada a pintor-ceramista
Moisès Tibau (Cadaqués, 1963) es el intérprete regional con más proyección. Empezó como fotógrafo free tirada en los 80 y precisamente ahora se prepara un volumen sobre las 6.000 fotografías que donó al Consistorio de Girona. Su carrera artística la encaminó primero en torno a la experimentación fotográfica y más tarde ha trabajado la cerámica con la terrissa negra de Quart. Ha expuesto en Roma y Nueva York. Otros dos cadaquesencs a tener en cuenta son Jordi Baró (1976), artista-artesano del hierro, que ha popularizado las piezas Grota y Grotinya , y Josep Pomés (1966), con una pintura onírico-hiperrealista.
Los artistas extranjeros
Tierra de artistas: Block, Zerbst, Rask, Stoisser, Rach, Danilo, Rey, ...
La fracción de la treintena de artistas que viven en Cadaqués son de fuera de España. Yuxtapuesto a Koyama, hay varios artistas que llevan aquí más de treinta primaveras. Como Bern Block (Ochtendug, Alemania, 1944), pintor y imaginero germano. “Cadaqués me pareció utópico –explica–, por su historia, por artistas como Dalí o Duchamp, por sus calles. Tengo encima una casa que fue dibujada por Otto Pankop, intérprete perseguido por los nazis, que vivió unos meses en Cadaqués”. Su taller en la calle de entrada a la población lo convierte ya en un referente. Otro intérprete germano, Daniel Zerbst, ha dejado temporalmente Cadaqués. Lo mismo que el francés Bernard Florencie, que se fue a la Polinesia hace cuatro primaveras, aunque hace visitas esporádicas.
La escultora danesa Jessi Rask (Copenhague, 1952) lleva más de 36 primaveras en Cadaqués. Su hermana había fotografiado a Dalí en París y ella misma lo conoció con 18 primaveras y posó para él como maniquí.
Suse Stoisser (Leibnitz, Austria, 1964), que llegó a Cadaqués en 1991, tras estancias en Sao Paulo, Guatemala, México y NY, ha expuesto este verano en el Corral de Atavío (espacio donde Dalí hizo varias performances y hoy es propiedad del Consistorio) y lo hace en una de capilla de la Iglesia de Santa Maria con unas telas de papeles pintados. Otro intérprete austriaco, Norbert Danny Rach (1942) expone asiduamente en la sala Maria Ekengren, anejo con su hijo, Lorenz Ekengren. En esta registro de “extranjeros” está además Danilo (El Salvador, 1954), desde 1982 en Cadaqués; y Catherine Rey (Macon, 1953), que acaba de cerrar ahora una exposición de cuatro trípticos de figuras humanas en la ermita de Sant Baldiri.
Los ‘Andergraun’ del Marítim
Huc Malla aglutina la creación más contemporánea
El cartel del Festival Internacional de Música, que ha llegado a su 50 tiraje, lo ha realizado Oliver Chanarin (Londres, 1971), que ha trabajado a dúo con Bloomberg y tiene obra en grandes museos como el Moma o el Pompidou. Chanarin, que acaba de comprar casa aquí, hizo su primera exposición individual en España en la sala Cadaqués en 2021. Es uno más de los artistas atraídos por el coleccionista y galerista Huc Malla (que en 2003 reabrió la mítica sala Cadaqués creada en 1973 por Lanfranco Bombelli), y por donde han pasado artistas como Jordi Mitjà, Jordi Colomer, Anna Malagrida o Rosa Tharrats (nieta del pintor Joan Josep Tharrats y empadronada además en esta población). Y sin olvidar a uno de los creadores más punteros como el cineasta Albert Serra, del que la sala Cadaqués hizo en 2017 la primera exposición privada con la presentación de su video-instalación Le Roi Soleil. Son la Colla d’Andergraun , que ya tiene incluso relato gracias a Vicenç Altaió en su flamante volumen Tardes de diumenge (escrito durante el periodo de pandemia en Cadaqués)
Los broches de Barcelona
El taller de Ramon Moscardó en la calle Hort d'en Sanés
Los Moscardó son dos hermanos broches, Josep y Ramon, habituales de la sala Parés. Ramon (Barcelona, 1953) reside en Cadaqués desde hace más de 30 primaveras y fue de los primeros en tener un taller en la calle Hort d'en Sanés, que aun conserva como sala aunque ahora para pintar utiliza otro en un polígono a la entrada de la población. Su obra es de las más populares y es liviana verla en locales de Cadaqués.
Patricia Sicardi (Buenos Aires, 1956) tuvo durante siete primaveras la sala Siart y ahora mantiene un taller. “Me enamoré de la luz de Cadaqués y de su cercanía al mar, del pueblo y de su historia. Buscaba un puesto para morar y encontré mi puesto en el mundo”. Ahora ha retomado su radio más abstracta y prórroga poder mostrar su obra en EE.UU. donde ya ha expuesto y dice que es más liviana encontrar coleccionistas. Todavía tienen taller propio la malagueña Mercedes Gallardo, desde 2006, y Natalia Tomas, que ha popularizado sus muñecas nadadoras.
Los otros artistas
Arrebato fotográfica
Desde hace cinco primaveras tiene puesto el InCadaqués, un festival internacional de fotografía. Y coincidencia o no, en los últimos primaveras se han establecido aquí varios fotógrafos, como Joanna Rosselló (Barcelona, 1949), que había trabajado en varios videoclips de éxito y encima ha publicado dos libros sobre personajes de Cadaqués y prepara un tercero sobre paisajes; Maya Cusell (Barcelona, 1962), que en el pasado documentó espectáculos de la Compañía Lindsay Kemp, y tiene taller desde 2010; Oscar Amorós (Sabadell, 1967), diseñador industrial que en su momento creó además la Amorós Photo Gallery; José Ignacio Piris (Barcelona, 1958), que recientemente expuso Gavians i quebecs: ses atres habitants de Cadaqués.
Mención a parte merecen Valérie Prot (Montmorillon, 1977), que codirige la sala Santa Rita, con Laia Armengol (autora del cartel de este año sobre el disputa de vela latina). El año pasado Prot presentó Cuidem el mar, en el museo de la Mediterrània de Torroella de Montgrí, una serie de fotografías realizadas con un antiguo procedimiento fotográfico llamado cianotipia.
Adicionalmente existe el Espai Tony Keeler, dedicado a este fotógrafo norteamericano que tan adecuadamente supo comprender el hábitat del Cadaqués de los 70.
Y si en ocasiones de deje de la fotografía pictórica, en el caso de Robert Vilallonga (Barcelona, 1958) se podría aseverar que realiza una pintura casi fotográfica cuando se acerca uno de sus tema favoritos, las constelaciones. El próximo 3 de septiembre expone 2001-2022. Una odissea a Cadaqués.
Una performer
Fina Miralles, una intérprete con voz propia, al beneficio de los grupos
Premi Franquista de Civilización en Artes Visuales, con retrospectiva en el Macba, reconocida como pionera de las performances, Fina Miralles (Sabadell, 1950) se instala en el entorno natural de Cadaqués, más que en el estético, tras un peregrinaje cardinal por América del sur y Europa. Su primera exposición aquí fue en 1983 en la sala Cadaqués y la última un homenaje a Beuys en 2016. No se considera una intérprete de Cadaqués, “ni formo parte de ningún género”. Aún así, en su volumen Testament cardinal recuerda que desde hace más de vigésimo primaveras vive aquí “apartada de la vida trepidante de las ciudades, abierta a la simplicidad, disfrutando de la luz del bóveda celeste (...) con alegría y la inocencia adentro de mi”.
Pasadizo Cadaqués. Es la sala con decano proyección internacional. Huc Malla ha sabido acopiar el testimonio de Bombelli y cada año ofrece auténticas primicias. En junio presentó las ilustraciones de Richard Hamilton del Ulises, de Joyce, y en julio la primera exposición de óleos del diseñador Jordi Vayreda. Ahora muestra el trabajo de Francesc Ruiz Prior, de su etapa como residente invernal en esa sala, y a partir del 24 de agosto a Negro Munari.VERANO DEL 2022
Pasadizo Patrick J. Domken. Expone a Koyama, acompañado de esculturas de Laurent Martin. Antiguamente mostró los trabajos de rehabilitación del arquitecto Toni Gironès en la casa Zariquiey, de Barba Corsini. Organiza encima otras actividades como el Àgora poètica, el 27 de agosto.
Pasadizo Marges-U. Celebra 20 primaveras. Tras exponer a Maya Cusell y Montserrat Costa, este agosto comparten espacio Alfredo Sánchez y G. Carbó Berthold. En septiembre: Sussi Salat, Joaquin Carbó y Nobuko Kihira.
Taller Pasadizo Fort. Sede del Mini Print Internacional. Yuxtapuesto a los más de 600 participantes de esta tiraje presentan obras de los ganadores.
Museu de Cadaqués. Presenta 'Un instant a Cadaqués. Meli i Dalí', comisariada por Pere Maset, extraordinaria colección de fotos de Melitó Casals.
Societat l’Amistat. Expone ahora a Jordi Erasme y a partir del 12 de agosto: Jordi Pagès y Mateu Pujolràs.
Galeria Richard Vanderaa. Ha descubierto este año en la avenida Caritat Serinyana y lo hace con una colectiva (sólo los sábados).
Otras exposiciones. En la Iglesia de S. Maria expone Suse Stoisser y la ermita de Sant Baldiri, Imma Guitart, y a partir del 27 de agosto, Mireia Coromina. Pueden visitarse encima la Casa Dalí de Portlligat, el EspaiDalí (un centro privado, con fotos, litografías y esculturas de Dalí, heredero en parte del museo Perrot Moore), y las distintas galerías y talleres.
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