Isabel Díaz Ayuso ha participado este martes en el Congreso de los Diputados en los actos conmemorativos del Día de la Constitución. Y lo ha hecho quitando hierro al desmarque de Vox en plena negociación de los presupuestos regionales de 2023 posteriormente de que la formación de Rocío Monasterio presentara sus enmiendas al texto auténtico.
"Hemos estado esperando dos meses para negociar, y al final no ha podido ser", ha señalado Ayuso a su aparición al Congreso de los Diputados. Sin incautación, la presidenta de la Comunidad de Madrid se ha mostrado confiada en que los dos partidos acabarán entendiéndose para sacar delante las cuentas.
La presidenta regional ha recordado que Vox presentó sus enmiendas parciales a los presupuestos fuera de plazo, y que, adicionalmente, un tercio de sus enmiendas siquiera se hubieran podido tramitar porque contenían defectos de forma.
"Hay entendimiento, pero no se han presentado las enmiendas proporcionadamente", ha resumido Ayuso, que ha señalado que en todo caso queda "mucho trabajo por delante" y el Gobierno regional va a hacer las cosas "correctamente, conforme a acuerdos", con el fin de dar "estabilidad a Madrid".
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo (i), ha arropado a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (d) 
Ayuso avisa de maniobras para cambiar la Constitución por la puerta de detrás
A nivel franquista, la presidenta de la Comunidad ha pedido que haya un cambio de Gobierno en 2023 ya que, de no haberlo, puede montar el "zaguero capítulo del compendio que se empezó a construir en 1978" y que llegarán "situaciones como consultas o tensión entre regiones".
Ayuso ha verbalizado un mensaje de amenaza advirtiendo que "de lo que emane de las urnas en 2023 pasarán dos cosas: o proporcionadamente que los españoles sigamos escribiendo juntos nuevas páginas o que se obstrucción para dar paso a lo derrochador de 2024 a otro tipo de situaciones territoriales, a consultas, a tensión entre regiones y una hoja de ruta que algunos vienen construyendo desde hace 40 primaveras mientras el resto del país trabajaba noblemente".
En su intervención antaño de entrar al acto, ha destacado que "todos" cambiarían algunos artículos de la Carta Magna, pero que su "fortaleza" es "retener ceder". Entiende que hay que defenderla con "convicción firmeza y compromiso" y ha deseado que hubiera un Tribunal Constitucional "independientes" e "instituciones fuertes", situaciones que cree que "con este Gobierno no están pasando".
"Esta Constitución de 1978 no es perfecta porque no es de nadie y esa es la voluntad del texto", ha proseguido la presidenta, quien ha censurado que haya quienes buscan "transfigurar" España "por la puerta de detrás".
En este sentido ha remarcado que lo que debería buscarse es que "aquellos desleales que quieren irse de España", no consiga "falta" y ha instado a dejar de "premiarles" porque "piden privilegios mientras odian al país". "No merecen falta, apelo al pueblo castellano", ha insistido la presidenta de Madrid.
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