Desconectar de la rutina, relajarse, disfrutar y, si se puede, hacer alguna parada. El verano es para muchos una buena época para coger el coche y lanzarse a la carretera en escudriñamiento de aventuras y desconexión. No obstante, la seguridad es primordial, especialmente en esta época donde la circulación es más densa y el calor puede jugarnos una mala pasada.
En el coche, hay que sobrellevar siempre a los niños sentados en su Sistema de Retención Pueril (SRI)
Dispositivos de seguridad como el cinturón o el airbag son imprescindibles para evitar o someter lesiones graves o fatales en caso de contratiempo. Sin retención, no hay que olvidar que si viajamos con niños estos pueden ser especialmente vulnerables en caso de contratiempo y por eso es tan importante escoger el sistema de retención inmaduro (SRI) adecuado y retener cómo colocarlo. La Alianza Española por la Seguridad Pueril (AESVI), inmediato con la Dirección Caudillo de Tráfico, han primoroso el Decálogo de la Seguridad Viario Pueril con las diez reglas de oro que debemos tener en cuenta antaño de comenzar nuestro alucinación.
10 reglas de oro que debemos tener en cuenta antaño de comenzar nuestro alucinación
1. El SRI (sistema de retención inmaduro) es imprescindible
La estatuto española obliga a que los menores con mérito igual o inferior a 135 cm utilicen siempre un sistema de retención adaptado a su peso y mérito. Asimismo, el Decálogo apunta la importancia de no dejar nunca a un caprichoso solo en el coche, sin ser supervisado por un adulto, y más especialmente en esta época del año donde el calor es un peligro añadido.
2. Dónde comprar el SRI
Es aconsejable que compres este dispositivo en establecimientos especializados, donde podrás preguntar todo lo que necesites y te aconsejarán sobre cuál es es el más adecuado para tu caso.
Hay muchos tipos de SRI, por lo que es mejor presentarse a una tienda especializada para que te aconsejen 
3. Nunca de segunda mano
Al tratarse de un dispositivo de seguridad lo mejor es no jugársela. Nunca sabes con qué te puedes encontrar, por lo que se aconseja no utilizar sillitas de segunda mano. Por otra parte, tras un contratiempo, es imprescindible cambiar el SRI.
4. Homologación
Antaño de comprar la sillita, comprueba si esta está homologada y si en la formalidad incluye el peso y la talla para los que ha sido diseñado.
Los menores deben ir sentados en la parte trasera del transporte
5. Sistema de atraque
Antaño de comprarla, es importante que examines el sistema de atraque de tu transporte y compruebes si el SRI predilecto se adapta correctamente.
isofix
6. Asientos traseros
Por norma, los menores deben ir sentados siempre en los asientos traseros del transporte, y es allí donde debemos instalar el SRI, preferiblemente en el centro.
Solo podrán instalarse delante cuando el transporte no disponga de ellos, cuando estén ya ocupados por otros menores de las mismas características o acertadamente cuando no sea posible instalar en dichos asientos todos los sistemas de retención inmaduro. Solo en estas situaciones los menores podrán sentarse en el asiento punta del transporte.
Es importante cambiar el SRI tras una colisión
7. A contramarcha
Lo más seguro es que el último alucinación en el sentido contrario a la marcha, siempre siguiendo las normas que fijan tanto el fabricante del SRI y del transporte.
bebé en una sillita a contramarcha
8. Sillitas con respaldo
Asimismo, el Decálogo aconseja que en el caso de los niños más mayores, se utilicen SRI con respaldo (y no alzadores) para que así viajen más protegidos frente a los impactos laterales.
Cualquier objeto que alucinación suelto en un automóvil se convierte en un auténtico peligro para sus ocupantes 
9. No sobrellevar objetos sueltos
Aguantar cualquier objeto suelto en el coche no solo dificulta la visión del conductor sino que adicionalmente los convierte en auténticos proyectiles que pueden machucar y herir a los ocupantes en caso de colisión o frenazo.
10. Desnivel
Si sufrimos un contratiempo, es importante que en la medida de lo posible se retire al último inmediato al SRI, nunca en brazos.
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