Ya hace primaveras que Andorra se ha situado entre una de las mejores destinaciones ciclistas. Ahora, con un esquema encarado al mundo profesional, el país prepara el Centro Residencial en Nivel Medicodeportiva de Andorra (CRAMEA), situado a 2.508 metros de nivel.
Este cifra será secreto para el explicación de las concentraciones de los equipos. Los entrenamientos en nivel son claramente beneficiosos durante los periodos de preparación deportiva y las formaciones profesionales suelen hacer stages de varias semanas en emplazamientos de este tipo. De hecho, el nuevo centro de Andorra, situado en el Port d’Envalira, será la nueva narración del sur de Europa.
Hasta ahora, las instalaciones de Sierra Cellisca y Font Romeu (Francia) solían acoger a los corredores, pero la entrada de este nuevo arduo supondrá un cambio en el panorama, ya que superará los otros centros con unos 200 y 700 metros de nivel de diferencia.
El C.A.R. de Sierra Cellisca se sitúa a 2.320 metros de nivel.
En un inicio, se presupuestó una inversión de 16 millones de euros, pero parece que la monograma va a ascender hasta los 22 millones. Las instalaciones contarán con unos 9.000 metros cuadrados, 80 habitaciones y una capacidad por 140 deportistas.
Se prevé que el antiguo edificio de Sud Ràdio se convierta en el nuevo CRAMEA a mediados de 2025. Para estas fechas, algunos equipos ya lo utilizarán como preparación para el Tour o la Envés de aquel año. Uno de los bloques más asentados en Andorra, Ineos, suele ubicarse en la zona del Tarter y no dudarán en dar un brinco de calidad con el nuevo CRAMEA.
Durante el periodo invernal, atletas de los deportes de cocaína harán uso de las instalaciones, aprovechando su inmediatez con la época de esquí de GrandValira.
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