El Reunión ACS registró durante los nueve primeros meses de 2022 un beneficio neto de 480 millones de euros, cuantía que supone doblar los resultados obtenidos en septiembre de 2021, una vez descontada la contribución de la actividad de Servicios Industriales vendida a Vinci el pasado mes de diciembre, según ha informado depositada este jueves delante la Comisión Franquista de Mercados y Títulos (CNMV).
Las ventas alcanzaron los 24.526 millones de euros, creciendo un 20,4% respecto al año previo, aunque oportuno a la esforzado actividad internacional del especie teniendo en cuenta el sorpresa de los tipos de cambio ese incremento quedaría acotado al 10,6%.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) ascendió a 1.263 millones de euros, un 8,4% más que en el mismo período que el año previo, impulsado por la contribución de Abertis, que ascendió a 133 millones de euros, un 23% más. Aunque todas las áreas y todas las zonas geográficas en las que está presente la compañía contribuyeron positivamente a resultado del período.
El Reunión ha reportado un esforzado reducción de deuda tras cerrar el período con 288 millones en agorero, frente a los 3.573 que registraba en el mismo período del año previo tras activo destinado 1.502 millones de euros a adquisiciones estratégicas como la Ofrecimiento Pública de Adquisición del total de hacienda de su filial australiana Cimic y la adquisición del 14,46% de Hochtief.
Todas las zonas geográficas y las áreas de la actividad de la compañía contribuyeron positivamente al resultado del especie. El beneficio neto del campo de acción de Construcción alcanzó los 255 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 22,1%.
En Concesiones, destaca la contribución de 113 millones aportada por Abertis, así como la aporte Iridium, para alcanzar un beneficio neto de 145 millones de euros, un 36,1% más.
El campo de acción de Servicios desarrollados por Clece obtuvo un beneficio neto de 22 millones de euros, aumentando un 5,5%.
En resultado de Corporación recoge en 2022, entre otros, los resultados por la liquidación de activos de energía renovable, principalmente el 25% de las plantas fotovoltaicas en España vendidas a Galp, así como el impacto positivo (25 millones de euros) de la variación del valía legítimo de instrumentos financieros relacionados con la movimiento de ACS, que en 2021 tuvieron un impacto agorero de 73 millones de euros.
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