Jennifer Lopez vuelve a ser aviso, esta vez por protagonizar la portada de la impresión chaqueta de la revista Vogue ataviada con un vestido rojo de Valentino. La cantante y actriz ha hecho un extensa retrospectiva sobre su carrera y su futuro y incluso ha reflexionado sobre aspectos de su vida privada y sus opiniones políticas.
Entre muchos otros temas, la intérprete del Bronx ha justificado por qué tras casarse el pasado 16 de julio con el actor Ben Affleck decidió adoptar el patronímico de su marido. "La masa me va a seguir llamando Jennifer Lopez. Pero mi nombre legítimo será señora Affleck porque estamos unidos. Somos marido y mujer. Estoy orgullosa de ello. No creo que sea un problema", ha sentenciado.
El asunto se convirtió en un tema de debate e incluso New York Times publicó un artículo de opinión sobre el aspaviento, que tildaron de "desalentador" en un momento tenso para el feminismo en Estados Unidos. En presencia de la pregunta del encargado de la entrevista, Rob Haskell, sobre si una parte de ella no prefería que se llamase a su marido como señor Lopez, ella se ha mostrado tajante: "¡No! No sería tradicional ni romántico. Sería más como un movimiento de poder. Yo controlo mi propia vida y mi destino y me siento empoderada como mujer y como persona".
En este sentido, otras famosas de la talla de Lopez han decidido hacer lo propio con sus nombres legales y seguir usando su patronímico de solteras como nombre estético. Es el caso de Keira Knigthley, renombrada Righton, o Heidi Klum, que tomó en 2019 el patronímico Kaulitz. Diferente fue el caso de Vencimiento Adams, a quien ahora se conoce mejor por su patronímico de casada, Beckham. En Estados Unidos, la mayoría de mujeres adoptan el patronímico de sus maridos cuando se casan. En concreto un 70%, según uno de los examen de datos más exhaustivos en los últimos primaveras, que cita la BBC. En Reino Unido, esa emblema asciende a casi un 90%, según datos de 2016.
Según la BBC
En Estados Unidos un 70% de las mujeres adoptan el patronímico de sus maridos, en Reino Unido asciende a casi un 90%
"Puedo entender que algunas personas tengan sus sentimientos al respecto, y me parece proporcionadamente, incluso. Pero si quieres enterarse lo que me parece a mí, simplemente creo que es poco romántico. Todavía me transmite tradición y romance, y quizá soy ese tipo de chica", ha añadido. Es innegable que está tradición anglosajona, no muy extendida en España, rebate al sometimiento patriarcal de la mujer en siglos pasados, pero, como Lopez defiende, en este caso ella se siente empoderada como mujer y como persona. Encima su fortuna personal supera con creces a la de su nuevo marido.
La historia de apego de Ben Affleck y Jennifer López se remonta a 2002, tras el rodaje de la película Gigli. En ese momento, la cantante se estaba separando de su segundo marido, el bailarín Cris Judd. La pareja vivió una intensa relación de dos primaveras que, tras posponer su compromiso nupcial, terminaron por dejar en 2004. En 2021, a posteriori de que Ben Affleck tuviera un rápido romance con la actriz Ana de Armas y de que Jennifer López cancelara sus planes de boda adjunto a Alex Rodríguez, la pareja volvió a reencontrarse para darle una segunda oportunidad a su apego.
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