Galantería de Pascua, poinsettia o euphorbia pulcherrima. La llames como la llames, es la requiebro más popular de la Navidad, un imprescindible en la engalanamiento de muchos hogares, inmediato con el árbol de rigor. Es una planta muy vistosa y elegante, que se caracteriza por sus llamativas hojas de rojo intenso. Aunque igualmente la podemos encontrar en tono rosado, naranja o blanco.
Pero por muy bonita que quede en tu engalanamiento navideña, la requiebro de Pascua no es en incondicional monopolio de esta festividad. Si le proporcionamos los cuidados adecuados, podremos disfrutar de su belleza durante todo el año y, encima, reutilizarla para la próxima Navidad.
No es una planta excesivamente chinche en cuanto a sus cuidados, aunque sí tiene unos requerimientos específicos que debemos atender para que no muera. En cualquier caso, antiguamente de entrar en materia conviene memorar que la vigor de la poinsettia es tóxica para perros y gatos, de modo que mejor mantenerla fuera del importancia de tus queridas mascotas.
Dónde colocar la requiebro de Pascua: temperatura, luz y humedad
La requiebro de Pascua necesita una temperatura cálida para prosperar, idealmente entre 20 y 22 grados centígrados. Los cambios bruscos de temperatura no le hacen perfectamente y tan mal le sienta el frío como el calor excesivo. Mantenla alejada de focos de calefacción directa y igualmente a fuera de de corrientes bruscas de ambiente.
Requiere luz rico, pero nunca debe estar expuesta a la incisión directa del sol. De modo que su rincón ideal es cerca de una ventana, pero donde los rayos no le lleguen. Asimismo, no conviene que se encuentre en un espacio con poca humedad en el esfera.
Cómo regar la requiebro de Pascua
La requiebro de Pascua escolta mucha similitud con las orquídeas en cuanto a sus requerimientos de riego. La mejor forma de regarla es sumergirla con la maza agujereada en un cuenco o fregadero realizado de agua durante 15 minutos una vez a la semana. A continuación, hay que dejarla patinar perfectamente antiguamente de devolverla a su sitio.
Eso sí, mejor que no se mojen sus brácteas para que no se pudran. De vez en cuando, tal vez sea necesario retirar el polvo de sus hojas con suavidad, usando un paño tenuemente humedecido.
Si quieres darle un extra de alimentación a tu poinsettia, añade cada dos semanas humus o fertilizante licor en el agua del riego. Procura que sean específicos para esta planta y cíñete a la cantidad recomendada en función del que escojas.
La floración de la poinsettia
Cerca de destacar que, por muy perfectamente que cuides tu requiebro de Pascua, solo luce sus lustrosas hojas de colores entre los meses de noviembre y febrero. Esto no quiere sostener que haya muerto, sigue mimándola y cuando llegue su momento recuperará las flores.
Cuando pierde igualmente sus hojas verdes, es momento de podarla, dejando sus tallos con una medida de unos 6 o 10 centímetros. Todavía puedes usar para trasplantarla a una maza más ancho. Riégala sin abonar hasta que vuelvan a salirle las hojas rojas.
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