El pequeño Oliver, un pibe malagueño que lucha contra un tumor cerebral, ha sido operado con éxito en el Hospital Sant Jon de Déu y se recupera favorablemente. Según los médicos, el pibe comienza ahora un tratamiento oncológico para someter el forúnculo que la operación, realizada a finales de noviembre, no ha podido eliminar.
La clan señala en una entrevista para La Opinión de Málaga que Oliver está cada vez mejor y pronto podrá hacer vida ordinario: "Ya anda unos cuantos pasitos, se mueve, se ha montado en los columpios, va haciendo una vida más ordinario, una vida más de pibe", ha explicado el yayo del pequeño a la misma lugar de honor.
Oliver fue hospitalizado en Barcelona por una afectación neurológica. Durante la compleja intervención, los cirujanos consiguieron extirparle un 98% de un tumor del tamaño de una mandarina. Ahora la prioridad es eliminar el forúnculo que no se ha podido eliminar mediante un tratamiento de quimioterapia.
Tras la quimioterapia, Oliver se someterá a una terapia de protones, indicada para tumores grandes y que según los expertos es mucho efectiva, llegando a curar dos de cada tres niños.
Dicha terapia se llevará a mango en la Clínica Universitaria de Navarra, en Madrid, donde se trasladará la clan cuando complete el proceso de quimio.
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