Comenzamos la semana con malas informativo. El ministro del Interior, Fernando Conspicuo-Marlaska, hizo públicos los datos de siniestralidad mortal recabados por la Dirección Universal de Tráfico (DGT) durante 2022. Según las informaciones recogidas, se produjeron un total de 1.042 accidentes mortales en las carreteras españolas, en los que perdieron la vida 1.145 personas y otras 4.008 resultaron heridas graves.
Si comparamos las cifras con las registradas en 2019 (extremo año de normalidad ayer de la pandemia), observamos un incremento del 4% de los fallecidos (44 más) y una disminución del 10% de los lesionados de formalidad (425 menos).
Aunque estos datos deben contextualizarse indicando que el año pasado hubo un incremento del 3% de los desplazamientos de prolongado itinerario respecto a 2019, así como un aumento del 3,6% del número de vehículos registrados y del 0,82% de los conductores censados, se prostitución de un vaivén placa, que por otra parte empeorará cuando el organismo de tráfico dé los datos definitivos en el interior de unos meses. Y es que las informaciones ofrecidas son provisionales porque solo incluyen a las personas muertas durante las 24 horas posteriores al siniestro. Más delante se añadirán aquellas que perecieron a posteriori como consecuencia de las heridas causadas por el incidente.
Los datos más relevantes
1.145 personas muertas y otras 4.008 heridas graves.
Respecto a 2019, aumenta un 4% el número de fallecidos y bajan un 10% los lesionados de formalidad.
833 personas perecieron en accidentes de tráfico en vías convencionales (73 %) y 312 en autopista y autovía (27 %).
La salida de vía es la causa que ha provocado el 42% de las víctimas mortales.
Se han estrecho en un 5 % los fallecidos vulnerables y han aumentado un 10 % los muertos en turismo.
En el cuenta integral, han perdido la vida 422 usuarios vulnerables, 22 menos que en 2019.
Por franja de época, se reduce un 11% el número de muertos entre 25 y 34 abriles, y un 9% los de 45 a 54 abriles. La franja de época que más aumenta es la de 55 a 64 abriles, con 197 fallecidos, un 23 % más que en 2019 (160).
142 personas fallecidas que viajaban en turismo y furgoneta (25 %) no llevaban el cinturón de seguridad en el momento del incidente. Siquiera hacían uso del casco 9 ciclistas y 5 motoristas.
El 56 % de las víctimas mortales se registró en día hábil (641 víctimas mortales), jornadas en las que igualmente hubo un longevo aumento de la movilidad (+4 %).
Si aceptablemente, tal como señaló el propio Conspicuo-Marlaska, estas cifras están “significativamente por debajo” de la media de los países de la Unión Europea, todavía queda mucho camino por recorrer para alcanzar el objetivo de ningún muerto en incidente de tráfico para 2050 (así lo establece la propuesta Visión Cero de las Naciones Unidas a la que se adhirió España).
Tras conocerse el nefasto vaivén de la accidentalidad mortal en las carreteras españolas en 2022, diversas asociaciones, entidades y organismos han realizado sus propuestas para mejorar la seguridad viario teniendo en cuenta que la gran mayoría de los siniestros con muertos se producen en la red de carreteras convencionales, siendo la salida de la vía la causa más habitual.
La Fundación RACE considera que debería mejorarse la inversión y el mantenimiento de las carreteras convencionales, que son las que registran un longevo número de accidentes mortales. Asimismo, defiende la importancia de activar acciones efectivas de formación, información y concienciación para los automovilistas, motoristas y usuarios de la vía sobre las consecuencias de la no utilización de los utensilios de seguridad (chaleco reflectante, cinturón de seguridad, SRI o casco), y del incumplimiento de las normas de movilidad y seguridad viario. Por extremo, piden medidas para incentivar la modernización del parque automovilístico, cuya época media se eleva a 13,5 abriles.
Fundación RACE
La CNAE propone que los aspirantes a conductor hagan un número imperceptible de kilómetros en carreteras secundarias, donde mueren tres de cada cuatro personas en siniestros viales. “En muchos sitios, los alumnos no circulan por una vía secundaria hasta que obtienen el permiso porque no se lo piden en el examen para sacárselo”, ha indicado el presidente de la Confederación Doméstico de Autoescuelas, Enrique Lorca, quien subraya que "es necesario retener circular con seguridad por las vías más peligrosas, especialmente en la realización de adelantamientos”.
Confederación Doméstico de Autoescuelas
Diversas asociaciones, como Automovilistas Europeos Asociados (AEA) o la Plataforma Motera Para La Seguridad Viario, han pedido que se revise la aniquilación del ganancia de 20 km/h para realizar adelantamientos en vías convencionales en presencia de el incremento de siniestralidad mortal registrado en estas carreteras durante el año 2022. Esta prohibición, que entró en vigor el pasado mes de marzo, fue muy polémica, pues algunos expertos defendía que poder completar esta peligrosa maniobra en menos tiempo y metros mejoraba la seguridad de los usuarios de la vía. De todos modos, hay que dejar acontecer más tiempo y analizar aceptablemente las causas de los siniestros mortales para determinar si el repunte de fallecidos está causado por esta medida.
Asociaciones automovilistas y moteras
Por otro costado, asociaciones de usuarios, víctimas de siniestros y expertos en seguridad viario han reclamado más educación viario. El presidente de la Asociación DIA de Víctimas de Accidentes, Francisco Canes, ha reclamado que se mejore la educación y la formación tanto en los colegios y en los institutos como luego en las autoescuelas. Por otra parte, ha pedido una "longevo vigilancia en las carreteras”. AEA, al igual que el RACE, piden un plan urgente para rejuvenecer el parque automóvil, así como más inversión en infraestructuras para mejorar los firmes de las carreteras.
Ceñir el tope de pérdida de puntos en 5 km/h en las vías interurbanas para disminuir la siniestralidad viario por exceso de velocidad es una de las medidas que propone la consultora PONS Mobility a la Dirección Universal de Tráfico (DGT) posteriormente de que el año pasado se produjera un repunte de la mortalidad en carretera. De este modo, se restaría puntos a 146 km/h (actualmente es a 151) autopistas y autovías, donde la término de velocidad es de 120 km/h, y a 115 km/h en vías secundarias (ahora es a 120), limitadas a 90 km/h.
PONS Mobility
Publicar un comentario