El FC Barcelona pone este martes a la traspaso las entradas para el Barcelona-Manchester United. El partido del próximo 16 de febrero está considerado de parada peligro por parte de la Comisión Estatal de Antiviolencia. Y el club quiere evitar que se viva otra invasión como la del Eintracht de Frankfurt en el Spotify Camp Nou. Por eso, la entidad implementado una serie de medidas para controlar quién operación los tickets y quién accede al estadio.
La entidad se ha puesto las pilas al ver que el altercado coincidía con ocio en Gran Bretaña. “Nadie quiere que se sea otra vez una imagen como la del Eintracht”, confesó la vicepresidente institucional, Elena Fort. Aquel 14 de abril, se calcula que unos 30.000 aficionados alemanes ingresaron en el Camp Nou y celebraron el 2-3 que les clasificaba y eliminaba al Barça. Por eso, el Barcelona ha cuidado un nuevo protocolo. “Yo estoy segura que desde el club no podemos hacer carencia más ni tomar más medidas. Me parece que es prácticamente inalcanzable que vuelva a suceder”, vaticinó Fort.
El primer paso es que el Barcelona bloqueará la operación de entradas, que serán nominales, desde una IP británica y con tarjetas de ese país. El día del partido, que empieza a las 18.45 horas, se controlarán “todas” las localidades, aseguró la directiva. Por otra parte solo se permitirá ingresar al estadio por el comunicación 21 con vestimenta visitante y no al resto de instalaciones. “El Manchester United ha sido informado y son plenamente conocedores. Ellos han avisado a sus seguidores. No habrá sorpresas”, explicó.
En su día, el Barcelona puso el foco en sus propios abonados, ya que consideraron que se hizo un mal uso de los carnets. Para disputar contra la reventa, el club no abrirá las taquillas físicas hasta el día del partido, limita a 4 las entradas que cada persona puede mercar y deja sin propósito el carnet de niño y las entradas senior.
Por otra parte, la novedad que se introduce es que el socio abonado ceda su carnet tendrá que rellenar un formulario para avisar al club y la persona que haga uso del carnet tendrá que portar el DNI y el formulario impreso o digitalmente. “Este rostro ayuda al club, que podrá tener la trazabilidad de la entrada”, abundó Fort en caso de problemas de seguridad. El control de los carnets será azaroso pero no enseñar el documento supondrá la prohibición de penetrar al estadio. “Si se le pide el formulario y no lo lleva, se quedaría fuera del partido”, avisó la vicepresidenta.
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