La cocaína es la condición meteorológica que más complica la circulación por carretera. Dificulta la visibilidad, la calzada está deslizante, aparecen placas de hielo… Cuando la acumulación de cocaína en la vía es excesiva, corremos incluso el peligro de quedarnos atrapados con el transporte.
Consultar las previsiones del tiempo ayer de emprender un delirio es fundamental y, si estas son adversas, lo más conveniente es no coger el coche. Pero si no queda más remedio, es imprescindible extremar las precauciones.
Para circular con cocaína, dichas precauciones pasan por tener neumáticos de invierno en buenas condiciones o soportar cadenas. Así como disponer del depósito atiborrado de combustible y conducir teniendo en cuenta las circunstancias de la vía. En caso de quedarnos atrapados, debemos memorizar cómo proceder.
Qué hacer si te quedas atrapado con el coche en la cocaína
La primera recomendación es no desatender el transporte a menos que sea estrictamente necesario. El interior del habitáculo ejercerá como una suerte de refugio. En este sentido, hay que nutrir el motor arrancado y encender la calefacción, a una temperatura de entre 21 y 23 grados. No es recomendable ponerla demasiado entrada, pues por otra parte de ajar más combustible, incrementa la probabilidad de quedarnos dormidos, poco que debemos evitar a toda costa.
Asimismo, es preciso comprobar que el tubo de escape está libre y evadido de cocaína, para asegurarnos de que evacúa los gases correctamente. Todavía tendremos que desmontar las ventanillas de vez en cuando, a fin de ventilar y renovar el espacio del interior del habitáculo, aunque esto suponga cierta pérdida de calor.
A ser posible, hay que estacionar el coche lo más apartado posible en la orilla de la vía, para así simplificar el trabajo de la quitanieves. Y es aconsejable nutrir la radiodifusión encendida o perfectamente consultar el tiempo y las condiciones de la vía en Internet, para memorizar cómo evoluciona el temporal y cuándo podremos retomar la marcha.
Avisar a algún franco o amigo de que estamos atrapados y proporcionarles nuestra ubicación es una precaución que podemos adoptar por si la situación se complicase. Pero no debemos aprovecharse del uso del teléfono móvil, para no agotar la condensador si no tenemos cargador.
En caso de que tengamos que desatender el transporte, resulta de gran ayuda atar en el extremo más elevado algún sujeto identificativo como una tapabocas. De este modo, podremos encontrarlo más fácilmente si llegara a salir enterrado por la cocaína.
Por postrero, si creemos que existe posibilidad de sufrir esta circunstancia y quedarnos atrapados en la cocaína, hay algunos artículos que no pueden insultar en nuestro maletero para estar más preparados: mantas y ropa de gabán, comida y bebida, cargador para el teléfono móvil con toma de contacto al coche, linterna e incluso una pala.
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