El avistamiento de cetáceos es una actividad muy popular para poder observar ballenas en su hábitat natural. Es una experiencia única que maravilla a aquellos que pueden disfrutar de estas criaturas en liberación. Este momento todavía puede ser más singular si se consigue ver el arranque de una ballena.
Es lo que les ha sucedido a un clase de pasajeros que estaba observando a estos cetáceos en la costa californiana de Dana Point. Y hay prueba de ello: el Captain Dave's Dolphin and Whale Watching Safari ha conseguido inmortalizar el momento en el que una ballena sombrío da a luz a su bebé a paisaje de dron.
Como explica la empresa, al principio creyeron que era un avistamiento "característico de una ballena sombrío migratoria", pero a medida que se iban acercando descubrieron "poco de color naranja y rojo en el agua que pensaron que podían ser algas".
Igualmente se les ocurrió que "que podía tratarse de un tiburón o de un depredador" que estaba acechando a la ballena. Estaban completamente equivocados. Era su cría: "En superficie del final de la vida, era el principio de una nueva".
"La cría recién nacida empezó a educarse a nadar y a establecer vínculos con su mamá. La hembra incluso acercó a la cría a los barcos como si quisiera presumir de ella y saludar", explica el safari en la descripción del vídeo.
Pocas personas pueden presumir de esta experiencia
Los pasajeros de un barco de avistamiento de ballenas frente a la costa de Dana Point captaron un avistamiento único en la vida
Tanto los pasajeros como la tripulación son unos privilegiados, ya que es sumamente extraño presenciar este momento, sobre todo en el estado de California: "Las ballenas grises prefieren parir en las cálidas y protegidas lagunas de Muerto California, en México. Las lagunas ofrecen seguridad frente a depredadores como las orcas, así como agua caliente para los ballenatos que aún no han desarrollado una gruesa capa de lubrificante".
Las crías de ballena sombrío, pese a su corta permanencia, ya hacen honor a la especie a la que pertenecen: miden unos 4 metros al germinar y engordan más de 15 kilos al día alimentándose de la cuajada materna.
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