Intel instala en Barcelona un laboratorio de diseño de microchips

Intel ha electo Barcelona para rasgar un laboratorio pionero de diseño de microchips. El montón estadounidense ha cogido un acuerdo con el Barcelona Supercomputing Center - Centro Franquista de Supercomputación (BSC-CNS) para rasgar en sus instalaciones el centro de microprocesadores.

La inversión para poner en marcha el esquema será de 400 millones de euros, desembolsados de forma anual durante 10 abriles. “Cada año, el laboratorio captará 40 millones de euros. La parte será aportada por Intel y la otra parte por el Gobierno”, asegura a este diario Mateo Valero, director del BSC-CNS.

La inversión del Gobierno, que alcanzará 200 millones de euros, se enmarca en la aprobación del Perte de microelectrónica, admitido este martes con una dotación de 12.000 millones de euros procedentes de los fondos europeos de recuperación. El laboratorio de microchips es sin duda uno de los proyectos sino de este plan. Lo reconoció este martes en un tuit el presidente Pedro Sánchez, reunido con altos directivos de Intel en el foro de Davos: “Gracias Pat Gelsinger [consejero delegado de Intel] por nominar España para el laboratorio pionero de procesadores RISC-V”.

Según Valero, el laboratorio se pondrá en marcha de forma inminente con la contratación auténtico de 300 trabajadores y la previsión de ampliar el equipo en el medio plazo.

Las instalaciones se ubicarán en el edificio Nexus II, en el interior del circuito del Campus Nord de la Universitat Politènica de Catalunya, un espacio que estaba desocupado desde que el año pasado el BSC-CNS se trasladó a unas nuevas instalaciones en el mismo circuito del Campus Nord de la UPC. “Tardaríamos muchos abriles en construir un nuevo edificio y las evacuación de diseño de chips son urgentes, de ahí la comicios de este emplazamiento”.

Intel

Acuerdo con el Barcelona Supercomputing Center para utilizar sus instalaciones

La comprensión del laboratorio de microprocesadores es considerada como una inversión secreto para el futuro de la patrimonio del país. Más allá de suscitar tecnología y atraer talento enormemente cualificado en Barcelona, la presentación de un centro de este calado en España contribuye a dominar la dependencia extranjera de microchips, nociones tecnológicos secreto para el futuro de la industria. “Hemos creado un centro pionero en Europa. Los microchips que diseñaremos en Barcelona se podrán aplicar en tecnología de todo tipo, desde coches, ordenadores, superordenadores, móviles...”, asegura el director.

El esquema para atraer este laboratorio llevaba meses en progreso por parte del centro. A a lo espléndido de este tiempo, la iniciativa incluso ha contado con el respaldo de la Generalitat. Este martes fuentes de la Conselleria d’Empresa i Treball se felicitaron por la inversión. “La Generalitat siempre ha mostrado la máxima predisposición para acoger cualquier esquema que consolide parte de la esclavitud de valencia del chip europeo en Catalunya, es uno de los cinco proyectos prioritarios en la captación de las ayudas europeas Next Generation”, indicaron.

Cifras

El laboratorio arranca este año con 300 empleados en el edificio Nexus II del campus de la UPC

La puesta de Intel incluso alega a un vínculo histórico con el BSC, un consorcio conocido participado por el Profesión de Ciencia e Innovación (60%), la Generalitat (30%) y la UPC (10%).

Desde el año 2011, el montón estadounidense lleva a límite pruebas en las instalaciones barcelonesas con el objetivo de testear y subir su tecnología en el mundo de la supercomputación. A lo espléndido de los abriles, la multinacional ha ido renovando acuerdos con el centro, estrechando una relación que ahora ha fructificado en un centro de diseño de chips de primer nivel.

Iniciativa para instalar una factoría en España

El Gobierno incluso está impulsando una iniciativa para instalar una factoría de microchips en España. El esquema, que se enmarca en el interior del despliegue del Perte, aún se encuentra en período auténtico. “Todavía no sabemos el emplazamiento de la factoría ni la compañía que se instalará en España. Pero hay intención de enterarse esta inversión”, comenta Mateo Valero, director del Barcelona Supercomputing Center, que está asesorando al Gobierno en esta operación. Solo hay tres grandes compañías que fabrican chips en el mundo, la surcoreana Samsung, la taiwanesa TSMC y la estadounidense Intel. Con esta última empresa, que tiene plantas productivas en países como Alemania e Irlanda, “tendríamos un vínculo más apretado, aunque de todas formas cualquier fabricante será bienvenido”, añade Valero. La fabricación de microchips es secreto en el futuro de la industria de la automovilismo y la electrónica, más aún en un momento de crisis de suministro entero.