Las cenizas de José María descansan en una fanal enterrada en un bosque rodeado de plantas aromáticas y flores. Al ser biodegradable, este recipiente pasará a formar parte de esa misma tierra que alimenta a la cubierta vegetal del camino, en vez de permanecer en la naturaleza durante muchos abriles. Antonia, que quería ser enterrada, reposa en el cementerio en un féretro ecológico, desenvuelto de pigmentación y de barnices sintéticos, igualmente nocivos para el medio ámbito.
La concienciación por resumir las emisiones de CO2 y hacer de este un planeta sano y longevo para los que estamos y los que estarán vivos luego de nosotros -nuestros hijos, nietos…- igualmente ha llegado al sector funerario, que, a día de hoy aún se rige por el Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria de 1974, es proponer, de hace 50 abriles, y por las normas de contorno de emisiones de cada comunidad.
Las cenizas de José María descansan en una fanal biodegradable enterrada en un bosque de plantas aromáticas y flores, que pasará a formar parte de esa misma tierra en vez de contaminarla
Mientras al sector no llegan técnicas que ya se empiezan a vislumbrar, aunque hoy nos parezcan futuristas, como la hidrólisis alcalina, la criogenización o la deshidratación del cuerpo antiguamente de su entierro, muchas empresas de servicios funerarios ya están incorporando nuevas tecnologías a entierros y cremaciones, por un flanco. Por otro, se están preocupando por cuidar el medio ámbito desde lo más esencial de su actividad, como es sustituir en sus instalaciones las fuentes de energía tradicionales por las renovables.
Un ejemplo: la empresa funeraria Áltima ha puesto en marcha un plan para fomentar el autoconsumo energético instalando placas fotovoltaicas en cuatro de los centros que gestiona: Ronda de Dalt (Barcelona), Sitges, Castelldefels-Gavà y Figueres. La atrevimiento viene luego de una prueba piloto en el tanatorio de Vilafranca del Penedès, que el año pasado incorporó paneles solares.
Áltima ha renovado la totalidad de su flota de vehículos para que en 2024 sea 100% eléctrica
Como explica Alfonso Galdo, director de mantenimiento, calidad y medio ámbito de Áltima, “gracias a estas placas fotovoltaicas hemos conseguido un parquedad energético del 56%, que equivale a 17,4 toneladas de CO2 en lo que llevamos de año”. La empresa comenzó a calibrar la reducción de su huella de carbono hace siete abriles y ya basamento su logística de incremento en la sostenibilidad.
Otra de las iniciativas en el mismo sentido ha sido la renovación de la totalidad de la flota de vehículos para que en 2024 sea 100% eléctrica. Así, en los centros del Barcelonès y el Baix Llobregat ya poseen 36 vehículos, entre fúnebres, ambulancias y comerciales, que se mueven exclusivamente con electricidad. El objetivo es resistir a las 70 unidades cuando se complete el software, que igualmente tiene previstos 70 puntos de recarga en los aparcamientos de los centros que la empresa tiene en Cataluña.
Ataúdes ecológicos, urnas biodegradables y coronas de flores vivas
Lo decíamos al inicio de este artículo: los entierros y las incineraciones, estas últimas en claro crecimiento, sobre todo a raíz de la pandemia, igualmente se están adaptando a las nuevas evacuación en cuanto a sostenibilidad. Desde este año, esta empresa ya ofrece en todos sus centros féretros ecológicos y respetuosos con el medio ámbito, libres de barnices, tejidos sintéticos, vidrios o nociones metálicos.
De hecho, “en el momento de escoger cómo será el funeral, nos hemos poliedro cuenta de que las propias familias quieren ser sostenibles”, apunta Jaume Echaurren, director universal de Áltima, y un 40% de los usuarios ya escoge para las cremaciones urnas biodegradables con arcillas, sal o madera natural.
El servicio de Planta Viva permite confeccionar las coronas y los centros a partir de tiestos con plantas vivas 
En cuanto a los cementerios, el perímetro de Roques Blanques, en El Papiol (Barcelona), acoge varias alternativas al cementerio tradicional, como el Camino del bosque, rodeado de naturaleza, que permite clavar las cenizas en urnas biodegradables; el Bosque de la calma y los Árboles familiares, para inhumar las urnas de nuestros seres queridos al flanco de un árbol autóctono del Parque de Collserola; o el Parque y la Fuente del reposo, donde difundir las cenizas en un parterre zen o diluirlas en el agua de una fuente.
En el mismo cementerio, tramitado en concesión por Áltima, se están desarrollando proyectos de preservación de la flora y la fauna autóctonas del parque para proteger a las abejas, a los anfibios o a los murciélagos con la instalación de hábitats óptimos para su conservación. El servicio de Planta Viva, por otra parte, que funciona desde el año pasado, permite confeccionar las coronas y los centros a partir de tiestos con plantas vivas. De este modo se potencia el uso de requiebro viva y de proximidad, por otra parte de reducirse su sobrante, y se disminuye el uso de requiebro cortada importada, lo que supondrá un descenso de la huella de carbono durante su traslado.
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