Último ensayo con derrota para Nadal antes de Wimbledon

Postrer test de nivel completado ayer de que dé aparición Wimbledon. Rafael Nadal cerró su minigira sobre hierba con derrota en un hábitat muy conocido. Y no solo porque jugara su segundo partido en el Hurlingham Club en tres días delante un número estrecho de espectadores, poco difícil de ver cuando el castellano está en pista. Su rival era Felix Auger-Aliassime, pupilo de su tío Toni, con quien ya se las tuvo hace unas semanas en Roland Garros. Entonces el canadiense le llevó al confín: cinco sets en casi cuatro horas y media, obligándole a remontar.

En pequeña escalera, este viernes Auger-Aliassime reescribió el guion en el torneo de exhibición que se disputa estos días en el lujoso club londinense, situado en el acoplado distrito de Fulham. El prometedor tenista, cada vez más una ingenuidad, (21 abriles, nº. 9 del mundo) se impuso en el supertie-break para desempatar un igualado lucha (7-6(6), 3-6 y 10-3). Aunque el resultado era lo de menos.

Máxima igualdad y sin informativo del pie maltrecho

Lo más satisfactorio para Nadal en estos dos partidos -venció el primero contra Wawrinka- ha sido sentirse competitivo, sin tener informativo del pie izquierdo posteriormente del tratamiento al que se sometió falta más morder por decimocuarta vez el trofeo de Roland Garros. Por ahora juega sin aparentes molestias aunque será en la exigencia de la competición cuando pondrá más a prueba el que ha sido su talón de Aquiles a lo desprendido de su carrera.

La igualdad imperó en la impoluta pista verde, como correctamente refleja el señalador. En una tarde con constantes ráfagas de singladura y sin mucho más en mecanismo que la puesta a punto de los dos tenistas, costó ver puntos largos. Como norma genérico es lo que sucede en esta superficie, pero igualmente tuvo que ver el contexto. No dejaba de ser un partido de exhibición.

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Auger-Aliassime y Nadal se saludan traa el partido 

JOHN SIBLEY / Reuters

El primer set no dejó ocupación a ninguna situación de break. Tanto Nadal como Auger-Aliassime se mostraron sólidos con el servicio, especialmente el segundo, con 17 aces en total. Lo más cerca que estuvo el balear fue en el noveno mecanismo, con un 15-30 y 5-4 a gracia. Su oponente resolvió la situación y poco posteriormente, en un tie-break muy peleado, se llevó el astuto al agua. Una doble desliz inoportuna, con el 6-6, puso en bandeja la manga.

En la segunda pareció dar un paso más Nadal, quien rompió en el botellín mecanismo y no pasó apuros para permanecer su tiro y obtener el segundo parcial. Esa partidura erguido se torció en el supertie-break definitivo, con errores de bulto de revés que le alejaron demasiado de la conquista.

El canadiense podría ser su rival en cuartos de final de Wimbledon

No deja de ser su segundo partido en hierba posteriormente de tres abriles, cuando perdió en las semifinales de Wimbledon delante Roger Federer. Es una superficie donde la engaño no bota, sino más correctamente se desliza. La parte positiva es que el pie avanza correctamente, como se encargó de memorar Marc López posteriormente del entrenamiento temprano. 

"Esta superficie no te perdona falta, todo pasa muy rápido. Estamos entrenando con multitud que talego muy correctamente. De momento, todo es positivo. El tema del pie, que era lo que más preocupa siempre, va correctamente. Tenemos que concluir de ajustar los entrenos, el otro día jugó muy correctamente en la exhibición, y estar preparados para el partido del martes". 

Ese día jugará contra el argentino Francisco Cerúndolo, un estreno previamente plácido. Aceptablemente diferente será a partir de entonces, con un cuadro cominero que incluye al propio Auger-Aliassime en cuartos si los pronósticos se cumplen.

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