El PSOE ha incluido a última hora una rectificación para forzar al Consejo Genérico del Poder Jurídico a nombrar a sus dos magistrados del Tribunal Constitucional antiguamente del 13 de septiembre.
Según explican fuentes parlamentarias a La Vanguardia, esta rectificación la ha introducido hoy el PSOE a última hora a instancias del Gobierno. Lo que pretende es que el entraña de los jueces no se inhiba de su obligación de nombrar a sus dos magistrados, que impediría que el Gobierno presente los suyos.
Según estas mismas fuentes, en la rectificación se especifica que si en este plazo no se hace los nombramientos, el Ejecutor nombrará los dos suyos, a pesar de que la Constitución establece una renovación por tercios. Esta última audacia provoca un choque exterior entre el Gobierno y el CGPJ.
Precisamente el Gobierno, a través de una propuesta del PSOE, ha pasado el primer escollo para aprobar la reforma exprés del poder legislativo que va a permitir desbloquear el Tribunal Constitucional. Esta reforma había sido la primera rasgo roja impuesta por el nuevo presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, para desbloquear el Consejo Genérico del Poder Jurídico, en funciones desde hace más de tres primaveras.
El principal partido de la concurso presentó el pasado lunes un documento en el que comunicaba que estaba dispuesto a renovar el entraña de los jueces si el Gobierno retiraba la reforma de la Ley Orgánica del Poder Jurídico. Fuentes gubernamentales ya comunicaron que esta nueva propuesta era una nueva excusa del PP y anunciaron que seguirían delante con la reforma.
El Pleno del Congreso ha aceptado tramitar la reforma, lo que devolverá al CGPJ, aunque esté en funciones, su capacidad de designar a sus dos candidatos a la corte de garantías. Esta medida ha sido fuertemente criticada en el seno del entraña que preside Carlos Lesmes porque fue el año pasado cuando el PSOE y Podemos decidieron modificar la LOPJ para impedir que el Consejo pudiera hacer nombramientos mientras se encuentre en funciones.
Esta medida, según fuentes del Consejo, ha chocado con los intereses del Gobierno en el momento que ha llegado la hora de nombrar por parte del entraña a dos magistrados del TC. Si el Consejo no hace sus nombramientos el Gobierno no puede presentar a sus dos candidatos, que son esenciales para producirse de una mayoría conservadora a una progresista interiormente del propio Constitucional.
Este miércoles los socialistas han sacado delante tanto la toma en consideración de su proposición de ley como la tramitación en recitación única. Así, el Pleno la aprobará este jueves sin producirse por la comisión y se enviará al Senado. La intención es que quede admitido durante este mes de julio y así poder designar los nuevos magistrados en septiembre.
La toma en consideración ha prosperado con siete votos más de los 176 en los que está fijada la mayoría absoluta y que son el leve necesario para su aprobación, al tratarse de una ley orgánica. Por otra parte del PSOE y Unidas Podemos la han respaldado ERC, PNV y Bildu y se han opuesto el Partido Popular, Vox y Ciudadanos (Cs).
"Presión" del PP
En su intervención, el diputado socialista ha culpado al PP del “obstrucción” para desbloquear el poder legislativo y le ha pedido que deje el “populismo” en el que está instaurado y actúe con sentimiento de Estado.
El PP cree que la reforma es “anticonstitucional” aunque fuentes gubernamentales defienden que estando todavía Pablo Casado como líder del partido ya se negoció esta reforma para evitar un nuevo corte en el TC.
Aranda ha dibujado al partido de Núñez Feijóo de “preocupante dejadez constitucional" y de “atacar los cimientos institucionales”. "Estamos en presencia de el indisimulado deseo del PP de desentender sus obligaciones cuando estas le tocan", ha insistido el diputado socialista.
Por parte del PP han vuelto a tender la mano y ha ofrecido una última oportunidad para retirar la reforma y sentarse a negociar la renovación del CGPJ. Su diputado, Carlos Rojas, ha dibujado al Gobierno de “inestable y sin rumbo” y de tirar debajo la “edificación” de la Ecuanimidad.
Mientras que para Ciudadanos, esta reforma es una “trampa”, los de Podemos la ven esencial para contrarrestar el “secuestro” del CGPJ por parte del PP.
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