Netanyahu promueve más civiles armados, pero llama a no hacer justicia propia

El primer ministro de Israel, Pequeño Netanyahu, abogó este sábado por otorgar más licencias de armas para civiles tras un fin de semana afectado por tres ataques armados que dejaron siete muertos y cinco heridos, pero al mismo tiempo pidió a los israelíes no hacer imparcialidad por su propia mano.

Al inicio de una reunión con su ministerio de Seguridad, el derechista Netanyahu aseguró que presentará una serie de "medidas adicionales en la lucha contra el terrorismo, que incluyen acelerar y activar significativamente la concesión de licencias de armas para civiles autorizados".







Revocar los documentos de las familias de los terroristas

El ministerio de Seguridad israelí anunció esta albor una serie de medidas contra los palestinos, en respuesta a una serie de ataques este fin de semana, que incluyen la revocación de beneficios para las familias de atacantes y un plan para deportarles y activar las licencias de armas para civiles.

Las decisiones del ministerio llegan tras un importante ataque en un consolidación israelí en Jerusalén este ocupado el viernes por la confusión, en el que murieron siete israelíes y que representa el atentado palestino más mortífero desde 2008.

"El ministerio de Seguridad tomó una serie de decisiones para combatir el terrorismo y hacer que los terroristas y quienes los apoyan paguen un precio por ello", anunció en un comunicado la oficina del primer ministro, el conservador Pequeño Netanyahu.

El ministerio anunció seis medidas, incluyendo "la revocación de los derechos al seguro social y prestaciones adicionales de los familiares de terroristas que apoyen el terrorismo" y la "agilización y ampliación del otorgamiento de licencias de armas de fuego" para civiles.







Demoler la residencia abierto del atacante palestino

Adicionalmente, el comunicado anunció un plan para "proclamar la revocación de los documentos de identidad israelíes de las familias de terroristas que apoyan el terrorismo", una iniciativa que ya había sido impulsada por los miembros ultraderechistas del Ejecutor y que se prevé sea discutida este domingo en la reunión del ministerio de gobierno.

Si aceptablemente los detalles de tal propuesta aún no han sido difundidos, la medida aplicaría a aquellos palestinos que viven en el este ocupado de Jerusalén con permisos de residencia israelíes y que se verían obligados a radicarse en Cisjordania ocupada.

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 LV

Las medidas restantes anunciadas por el ministerio fueron la atrevimiento de demoler lo antaño posible la residencia abierto del palestino responsable del ataque del viernes -que murió poco luego por disparos de la Policía-, el refuerzo de tropas tanto militares como policiales en distintos sitios y el "fortalecimiento" de asentamientos judíos en Cisjordania.

El ataque del viernes por la confusión tuvo zona a las puertas de una sinagoga en el consolidación de Neve Yaakov, en Jerusalén este ocupada, y fue seguido por otro ataque con pertrechos de fuego el sábado por la mañana, asimismo en la parte este de la Ciudad Santa y en el que dos israelíes resultaron heridos.

Por otra parte, un palestino abrió fuego anoche contra un restaurante en un consolidación sefardita en Cisjordania y otro murió por disparos de colonos mientras intentaba entrar armado a la colonia de Kedumim.

Estos incidentes se producen en un mes de incesante violencia en la zona y en el que ya se registran 32 palestinos muertos y siete del flanco israelí. El repunte de este fin de semana fue desencadenado por una redada marcial israelí el jueves en la ciudad de Yenín, en Cisjordania ocupada, que se saldó con la crimen de nueve palestinos -incluidos varios milicianos- y fue seguida por el propagación de cohetes desde la Franja de Lazada.

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