Finalmente serán dos los aspirantes a ser los candidatos de Ciudadanos a la alcaldía de Barcelona y la militancia tendrá la última palabra. Tanto Anna Grau como Koldo Blanco han superado el acceso intrascendente del 15% de los avales requeridos en los estatutos de la formación tolerante, por lo que la próxima semana los afiliados decidirán cuál de ellos prefieren para encabezar la directorio naranja el próximo 28 de mayo.
Grau, que fue la primera en editar su candidatura en una entrevista en La Vanguardia, ha obtenido 61 avales, mientras que Blanco ha conseguido 39. La campaña electoral para las primarias se celebrará entre los días 10 y 14 de febrero y las votaciones se desarrollarán los días 15 y 16 de forma telemática. Sólo podrán desempeñar su derecho a voto los 260 militantes de la ciudad de Barcelona con una caducidad mínima de un año.
Koldo Blanco, en el centro, acompañado, entre otros, por los tres concejales de Ciudadanos, Julia Barea, Noemí Martín y Paco Sierra 
Acompañado por el coetáneo conjunto municipal de Ciudadanos en el Cabildo, cuyos tres miembros están enfrentados a la dirección autonómica del partido, Blanco, que asimismo fue concejal en Barcelona (2016-2019), presentó su candidatura el lunes pasado en una rueda de prensa en la plaza Sant Jaume y reclamó un debate con Grau, diputada en el Parlament y portavoz de la ejecutiva autonómica de Ciudadanos, para confrontar sus dos modelos en presencia de la militancia.
La situación de Ciudadanos en Barcelona es muy delicada y a la escisión original del conjunto a raíz del apoyo prestado por Manuel Valls a Ada Colau para que continuara al frente del Consistorio y la vara de mando no recayera en Ernest Maragall se sumó hace unos meses la renuncia de la líder desde entonces, Luz Guilarte, por su enfrentamiento con Paco Sierra, quien se ha manada la confianza de las otras dos concejales, Noemí Martín y Julia Barea, y ha sido expedientado por la ejecutiva que preside Carlos Carrizosa, que ha instado su expulsión del partido.
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