Aunque Inés Arrimadas se había mostrado oportuno a presentar una moción de censura contra el presidente del Gobierno y había instado al PP a encabezarla, la nueva dirección de Ciudadanos ha impuesto su criterio, contrario a la medida que ha impulsado finalmente la ultraderecha, y ha reiterado su rechazo delantero, que contrasta con la privación en la que se ampararán los populares.
Como venía haciendo desde noviembre, el pasado 7 de febrero Arrimadas insistió frente a los medios, en una comparecencia como portavoz de Ciudadanos en el Congreso, en que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, debía ser el encargado de defender la moción de censura y presentarse como alternativa de gobierno a Pedro Sánchez: "Si yo fuese la líder de la competición, no tendría ninguna duda", dijo entonces Arrimadas, para quien la moción de censura era una "útil útil".
Ya en aquel momento, la nueva dirección del partido, encabezada por Adrián Vázquez como secretario normal y Patricia Guasp como portavoz política, descartó esta posibilidad, enmendando de ese modo a la susodicho presidenta del partido, y subrayó que la posición de Ciudadanos es la de protestar elecciones anticipadas como paso previo al cambio de gobierno que, a discernimiento de la formación altruista, necesita España.
Y en esta misma crencha ha vuelto a incidir esta semana Guasp, tras el anuncio de que finalmente la presentación de la moción, que defenderá Ramón Tamames como candidato propuesto por Vox, se formalizará el próximo lunes en el Congreso: "El Gobierno de Sánchez es el peor gobierno de la historia de nuestra democracia, pero la moción de Vox es inútil. Votaremos en contra porque esta opción no garantiza progreso, arbitrio, igualdad y un futuro mejor para los españoles", dijo en Twitter.
En una rueda de prensa celebrada este mediodía en el puerto de Valencia, tras una reunión del comité doméstico concebida para divulgar las candidaturas de Mamen Peris como pretendiente a presidir la Generalitat y de Fernando Giner como alcaldable en la renta de la Comunidad Valenciana, la portavoz de Ciudadanos ha añadido que la osadía de sufragar en contra de la moción de censura es compartida "por todos", pero no ha aclarado si será la propia Arrimadas quien defienda la postura del partido en el debate.
Si "en algún momento fue útil por los atropellos continuos de Sánchez al Estado de derecho con la reducción del delito de malversación", hoy la moción de Vox "es inútil por los tiempos en los que nos encontramos", ha señalado Guasp, que todavía ha cuestionado la referéndum del casi noventón economista Ramón Tamames como candidato para defenderla.
"No tenemos ninguna duda de que el Gobierno de Sánchez, apoyado por populistas y comunistas, es el peor gobierno de la democracia en España", afirma Guasp
"No tenemos ninguna duda de que el Gobierno de Sánchez, apoyado por populistas y comunistas, es el peor gobierno de la democracia en España, pero la posibilidad pasa por convocar elecciones, en las que Ciudadanos ofrecerá como alternativa un esquema para corregir el país", ha concluido la portavoz, que ve a Sánchez a la retraso de "lucirse" en la presidencia europea gracias a los fondos europeos, dedicados a "superar votos cautivos" en motivo de a "elaborar" la posesiones, finalidad a lo que todavía atribuye Guasp el aumento de las pensiones.
Este libranza obedece, explica Ciudadanos, a que la moción de censura se defendió a finales del año pasado como una modo de frenar la reforma del Código Penal para derogar el delito de sedición y modificar el de malversación, poco que se vio, por parte de la formación que entonces presidía Arrimadas, como una concesión del Gobierno de Sánchez al independentismo catalán y singularmente a ERC, a quien "se ha vendido". Pero en la presente, con ese cambio asamblea ya en vigor, la iniciativa de Vox, asegura la nueva cúpula naranja, carece de sentido.
Publicar un comentario