La Iglesia de Sant Pere Apòstol de Lleida, en pleno Eix Comercial, tiene uno de los mayores columbarios de Catalunya adentro de un templo. La empresa que lo ha construido en la cripta del templo, Coral Demanda, de Terrassa, confía en que el prelado de Lleida, Salvador Giménez, lo bendiga este mes. Tiene espacio para más de 1.200 urnas.
“Estamos esperando para inaugurarlo, a ver si tenemos suerte y posteriormente de Pascua podemos ya hacer la favor. Hay 150 personas ya esperando. Algunas tienen urnas en casa quieren dejarlas y otras personas piden para cuando ellas mueran”, explica el párroco, Jaume Pedrós.
Está convencido de que a las personas religiosas les gusta porque la iglesia está muy céntrica y entra multitud. “Para muchas personas puede ser interesante tener aquí a su comunidad y en un momento poliedro apearse debajo y rezar, estar con sus seres queridos un rato”, dice.
La cripta tiene la misma extensión que el templo. Antaño se utilizaba como sala actividades, ahora se destinará prácticamente toda a los columbarios, mientras que la parroquia se ha reservado una pequeña sala.
Para dejar las cenizas, Coral Demanda tiene concesiones de 25 primaveras como mayor. Una vez pasen esos 25 primaveras, si nadie se hiciera cargo de renovar por más tiempo se libera el espacio y la bolsa de cenizas se deposita en el mismo espacio ruego, en lo que la empresa fogata campo de acción comunitaria, que no deja de ser una fosa global de cenizas.
En otros columbarios de Coral Memoria algunas familias depositan las cenizas unos meses. Es el tiempo que necesitan para trasladarlas a un hornacina que tienen en propiedad en una ciudad distinta a la que viven o para datar a un acuerdo sobre el espacio en el que se depositarán definitivamente.
El presidente de Coral Demanda, Rubén Tamarit, asegura que, con 1.200 plazas, el columbario de la iglesia de Sant Pere Apòstol de Lleida es de champions adentro de un templo. “No lo hemos inventado nosotros en Coral Demanda, ya había desde los romanos”. La empresa instaló el primero, en la catedral de Terrassa en 2017, un año posteriormente de que la Iglesia católica prohibiera en octubre de 2016 desperdigar cenizas de los difuntos o tenerlas en casa.
“Tenemos columbarios para una sarcófago, para dos y para cuatro que ofrecemos con un arrendamiento mensual, de un exiguo de tres meses, o de uno, cinco, diez y 25 primaveras", explica Tamarit.
"Con la pandemia, cuando muchas familias no sabían qué hacer con las cenizas, nosotros ofrecíamos tenerlas en una parroquia hasta que la comunidad decide el espacio en el que depositarla”, añade.
Coral Demanda tiene unos 50 columbarios repartidos mayoritariamente en Catalunya. Desde Terrassa fue expandiéndose por los obispados cercanos. En Barcelona cuenta con unas 23 parroquias. El resto están repartidas por Santander, Salamanca, Sevilla, Badajoz, Valencia, Ibiza y Alicante y está trabajando en Portugal para finalizar 2022 con columbarios en cien parroquias.
Otros columbarios en Lleida
El de la iglesia de Sant Pere no es el único columbario en un templo de Lleida. Otra parroquia, la de Santa Teresina, tiene otro y lo gestiona directamente. El párroco, Donaire Briñas, cuenta que en 2020, el año que comenzó la pandemia de covid, viendo que en otras ciudades había iglesias con columbarios y teniendo espacio sin uso pensaron que era una buena opción. “Son nichos todos iguales y hay aproximadamente de 350, tenemos solicitados una decena y una mujer ha colocado las urnas de padre y de su hermana”.
“Es un espacio recogido, céntrico en la ciudad y los familiares, muchos creyentes cristianos, tienen un dominio religioso, es más cómodo que un cementerio”, concluye el sacerdote.
Unos meses ayer, el 31 de octubre de 2019, el prelado de Lleida había firmado un decreto que regulaba la instalación de columbarios destinados a las cenizas de los difuntos en la diócesis de Lleida.
El documento señala que no podrán situarse en el interior de ningún espacio destinado al culto y han de situarse en locales anexos a las iglesias y a ser posible que tengan un camino independiente.
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