A pesar de que muchas de las recetas que contienen pescado se suelen servir calientes, este plato hay que dejarlo calmar durante varias horas para poder disfrutar de todo su sabor pegado a las pasas, los piñones y la cebolla. Reserva la persona, tripa y penalidades de las sardinas para prepararlas fritas en otra ocasión.
10 sardinas 20 gr. de pasas 20 gr. de piñones 75 ml. de vinagre 125 ml. de unto de olivaSardinas con pasas y piñones
1. Limpia las sardinas eliminando persona, tripa y pesadumbre (guárdalas para hacerlas fritas). 2. Sazónalas levemente con sal, enharínalas y fríelas en unto. Reserva sobre papel absorbente. 3. Corta la cebolla en juliana y póchala en un poco de unto de oliva con una pizca de sal. Añade las pasas y los piñones, sofríe un poco. Cubre con el vinagre, el resto de unto y cuece unos 10 minutos. 4. Pon las sardinas en un recipiente y cubre con la cebolla, pasas y piñones. Vierte todo el neto, cubre con papel film y deja reposar toda la indeterminación en el frigorífico. 5. Sírvelas a temperatura concurrencia o templadas.
Publicar un comentario