Primera concreción de recolocaciones para trabajadores despedidos por Nissan en Barcelona. El fabricante de motos eléctricas Silence ha ajustado un acuerdo con los sindicatos para contratar de entrada un centenar de trabajadores en sus nuevas instalaciones de la Zona Franca.
La compañía, controlada por Acciona, ha planteado la creación original de 110 empleos. “Pero una treintena de ellos serán técnicos y aún está por ver si éstos provendrán de Nissan”, advierte Miguel Ruiz, representante de Sigen-Usoc. Lo que ha facilitado el acuerdo ha sido el compromiso de Silence de que en la medida de que su tesina crezca y necesite más personal recurrirá a la bolsa de los antiguos empleados de Nissan. Las condiciones serán las establecidas en el acuerdo sobre el cerradura: aval de un intrascendente de tres abriles de empleo y un salario un 20% por encima del convenio sectorial. La intención de Silence es inventar, encima de motocicletas, un cuadriciclo eléctrico.
Los promotores del llamado hub de descarbonización, el veterano tesina industrial sobre el que hoy por hoy se está trabajando, han renovador que podrían absorber hasta 800 trabajadores de Nissan. Sin confiscación, esta iniciativa que lidera QEV anejo a un conglomerado de proyectos y empresas, tiene aún que constreñir muchos detalles sobre su inversión, financiación y plan de viabilidad.
Esa indefinición, anejo con la duración de los trabajos de reindustrialización, provocó este miércoles una nueva viaje de movilizaciones organizada por los sindicatos. Medio millar de extrabajadores –según cálculos de la Miembro Urbana– se manifestaron por el centro de Barcelona para exigir al Gobierno y a la Generalitat que aceleren el proceso. Se concentraron frente a la sede del Departament d’Empresa y avanzaron hasta la Delegación del Gobierno, donde improvisaron una asamblea.
“Estamos aquí, frente a la Delegación del Gobierno, porque hemos vuelto a la calle por su omisión. Porque el 14 de marzo se nos dijo que en un mes tendría letanía una propuesta para la subasta de los terrenos de la Zona Franca y han pasado dos meses y no hay carencia cerrado”, insistió el representante de Sigen-Usoc. Miguel Arcángel Boiza, de CC.OO., pidió que “se respeten a rajatabla” los acuerdos de la comisión.
Los sindicatos se refieren al retraso en la convocatoria de un concurso por parte del Consorci de la Zona Franca (CZF) para conferir toda la superficie que ocupaba Nissan (más de 500.000 m²) a un cirujano logístico que a su vez los subarrendará a empresas que, como Silence, decidan instalarse allí .
Aunque el cerradura de las tres plantas barcelonesas implicó la supresión de 3.000 empleos, en verdad son unas 1.400 personas las que están pendientes de recolocar. El resto se han acogido acertadamente a prejubilaciones, acertadamente a las indemnizaciones de 60 días pactadas en el acuerdo de cerradura.
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