Frente global de patronales y asociaciones del comercio y la restauración contra las supuestas intenciones del gobierno municipal de Barcelona de amojonar el horario de las terrazas de bares y restaurantes en algunas zonas especialmente saturadas de la ciudad y contra la atrevimiento de no consolidar los veladores provisionales instalados en diversos puntos del Eixample durante la pandemia. Foment del Treball, PimeComerç, Barcelona Comerç, Barcelona Oberta, Comertia y el Gremi d’Hotels de Barcelona emitieron ayer un comunicado en el que apoyan las reivindicaciones del Gremi de Restauració en lo que respecta a estas cuestiones. El pronunciamiento encontró la respuesta del primer teniente de corregidor, el socialista Jaume Collboni, que negó que el Concejo se esté planteando un cambio en el horario de candado de las terrazas.
En relación con los horarios, los agentes económicos rechazan cualquier tipo de retazo y reclaman el cumplimiento del pacto del 2018, suscrito por todos los partidos políticos con representación en el Concejo y que preveía suministrar el horario único de terrazas que se introdujo el 1 de enero del 2014, y que ya en sus momento representó un retazo. Según las patronales, lo que en verdad preocupa a los ciudadanos es “todo aquello que sucede en el espacio divulgado cuando acaba el horario de las actividades regladas, es sostener, botellones, incivismo, inseguridad, peleas desórdenes públicos, etcétera”. Por todo ello, piden que se dediquen más bienes a erradicar estos fenómenos y que dejen de responsabilizar de todos los males al sector de la restauración. Los firmantes recuerdan que el gobierno municipal se comprometió a consolidar las terrazas provisionales abiertas durante los tiempos de maduro incidencia de la pandemia. “El hecho de poder disponer de mesas en el exógeno determina en gran medida la viabilidad de muchos negocios del sector. Por otra parte, el nuevo moblaje urbano (obligatorio cuando la terraza se ubica en la calzada) perfeccionamiento el encaje en el paisaje urbano”, añaden.
Las organizaciones señalan que las cifras recién conocidas, con un 75% de denegaciones de licencias, contrastan con las declaraciones de los responsables políticos. Exigen que se reconduzca la situación “de modo inmediata” y que se cumplan los compromisos adquiridos, y denuncian que “el demasía” que el gobierno está protagonizando en relación con las llamadas “zonas saturadas” se utiliza como excusa para rehusar solicitudes de modo sistemática.
Collboni aclaró que en las áreas tensionadas no se consolidarán las terrazas covid, pero que no se plantea un cambio de horarios. El teniente de corregidor admitió que la retirada de las vallas New Suéter va más despacio de lo que sería deseable. “Hemos de atestiguar muchas terrazas y se han de hacer con los modelos homologados”, justificó Collboni.
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