Donald Trump tiene repertorio su ciñuela de mano política.
El expresidente dice en New York Magazine que “en mi menté ya tomé esa audacia” sobre si entrar o no en la carrera por la presidencia en el 2024. Ese estilo es el mismo que usó en mayo del 2015 antiguamente de su intento previo (y exitoso).
El singladura parece soplar privanza de los conservadores de cara a esas elecciones legislativas
Sus palabras le traicionan. Lo único que se cuestiona es si será “antiguamente o luego” de las elecciones legislativas del próximo noviembre, de lo que se deduce que luchará por la nominación.
En otra información, The Washington Post sostiene que Trump hará pública en septiembre su audacia de despabilarse una segunda estancia en la Casa Blanca. “De todas las cosas egoístas que hace cada minuto de cada día, probablemente sería la que más”, critican desde el Partido Republicano.
El expresidente de los Estados Unidos Donald Trump durante la convención anual de la Asociación Doméstico del Rifle (NRA) de este año
El singladura parece soplar privanza de los conservadores de cara a esas elecciones legislativas. Trump sigue siendo un negociador dominante –pese a su desgaste, en buen parte por la investigación del intento de impresión de Estado del 6 de enero del 2021–, pero en el partido temen que su anuncio sea un incentivador de los votantes demócratas.
Aseguran que la irrupción de Trump antiguamente de noviembre es uno de los sueños de los progresistas, que se frotan las manos.
Trump está rodeado por investigaciones políticas y por corrupción en sus negocios
Charlie Sykies, en The Bulwark, no alberga dudas. “Si no participa en la carrera, instantáneamente se convierte en irrelevante y en un artefacto vergonzoso y deplorable de la historia política”, afirma.
Hay más. Trump está rodeado por investigaciones políticas (la del 6 de enero es una entre varias) y por corrupción en sus negocios. La súbita crimen el jueves de su primera esposa, Ivana, supuso este viernes el aplazamiento de su deposición en el caso civil investigado por la fiscal militar de Nueva York.
Trump alberga la idea, según su entorno, de que el solo hecho de decidir su candidatura significará una protección y un marco que le haría intocable.
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