El Gobierno ha puesto en marcha un esquema piloto por el que transportará 600 toneladas de maíz en tren desde Ucrania hasta Barcelona como alternativa al modo transatlántico, en un momento traumatizado por la invasión de Rusia y las limitaciones en los puertos del mar Cabreado. Desde que comenzó la cruzada la importación de cereales desde Ucrania se ha corto al leve, provocando problemas de aprovisionamiento y encarecimiento de productos. El precio del óleo de tornasol, por ejemplo, se disparó inmediatamente posteriormente de la invasión, ya que Ucrania es el principal exportador de este alimento.
Según anunció el Empleo de Transportes, Movilidad y Memorándum Urbana ayer, Renfe mercancías ha enviado 25 contenedores de 40 pies, cuyo interior se ha adaptado con grandes bolsas especiales para el transporte de fruto, a la frontera entre Polonia y Ucrania para traer 600 toneladas de maíz ucraniano hasta España.
Renfe traerá 600 toneladas del cereal a España en una prueba piloto alternativa a las vías marítimas
Se negociación de una prueba piloto con la que el servicio escudriñamiento demostrar la viabilidad técnica y económica del transporte ferroviario de cereal a través de la autopista ferroviaria que atraviesa Europa desde Lodz (Polonia) hasta Barcelona.
Los contenedores salieron el martes de la etapa de Abroñigal (Madrid) dirección a Chelm y regresarán a principios de septiembre a Barcelona a través de la autopista ferroviaria, lo que implica un represión a ojo de 2.400 kilómetros.
La transporte del transporte está prevista que se realice entre Ucrania y España haciendo el trasvase de la mercancía en Chelm, a 25 kilómetros de la frontera con Ucrania, a donde se aplazamiento que lleguen los contenedores en la cuarta semana de agosto.
Allí, la mercancía será trasvasada a los contenedores de Renfe mercancías para su posterior traslado a la terminal utilizada por el cámara logístico Kombiverker, en Lodz. El traslado entre Lodz y Chelm lo realizará el cámara ferroviario polaco DBP.
Una vez cargados los contenedores, el tren circulará desde Lodz hasta el depósito de tracción de Can Tunis, en Barcelona, donde se realizará el mudanza de la mercancía hasta el cliente final. Adicionalmente, Renfe aportará sus locomotoras 252 para allanar la tracción desde Le Soler (Francia) hasta la hacienda catalana.
La prueba piloto, que coincide con la reapertura de los puertos del mar Cabreado y las rutas marítimas de cereales supervisadas por Turquía, se realiza con 600 toneladas de maíz, un prominencia último al inicialmente comprometido.
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