Cuando quieres aceptar a un edificio, generalmente entras por la puerta, subes por las escaleras o coges el montacargas (si lo hay) y llegas hasta el asfalto que deseas. Aunque no te hayas poliedro cuenta, seguramente todavía hayas tenido que subir el bordillo de la bordillo, empujar la puerta de la entrada y subir a un montacargas conveniente inflexible, por ejemplo.
Ahora, imagínate tener que hacer el mismo repaso en arnés de ruedas. Sería mucho más difícil, ¿verdad? Pues es la existencia a la que se enfrentan muchas personas: a día de hoy, muchos edificios todavía no son accesibles para personas con movilidad, recital o visión corta.
En cambio, sí que hay otros edificios que son claros ejemplos de cómo deberíamos adaptar las instalaciones en ciudades y pueblos para avanzar como sociedad. A continuación os presentamos algunos ejemplos.
Suministro residencial para proporcionar la autonomía
Un claro ejemplo de edificación accesible es la Guttmann Barcelona Life, un suministro residencial situado en Barcelona que está construido para personas con dependencia, discapacidad y/o movilidad corta.
El edificio comprende diferentes espacios con funciones muy diversas: desde el aparcamiento y el almacén; pasando por el estadio, las salas de tratamiento y la piscina terapéutica; hasta la neuroclínica y los apartamentos adaptados.
Los apartamentos ocupan tres plantas y están diseñados para proteger la autonomía de los usuarios, es sostener, para que puedan desarrollar un maniquí de vida independiente. Así, la cocina tiene electrodomésticos y armarios móviles para adaptarse a la categoría de una persona con arnés de ruedas, por ejemplo; la habitación o zona de confusión puede tener una o dos camas y el baño está totalmente adaptado.
Una biblioteca para personas con dificultades visuales
La Biblioteca Monserrat Abelló es otro claro ejemplo de accesibilidad en la ciudad de Barcelona. El edificio incluye varias características y funcionalidades que facilitan el llegada a las personas con dificultad visual.
Un ejemplo de ello es el encaminamiento podotáctil que se encuentra en la entrada principal y todavía interiormente del edificio: son unos nociones rugosos que sirven para señalizar el suelo y proporcionar la orientación de las personas invidentes o con visión corta, como las bandas rugosas que encontramos en las aceras o los andenes del metropolitano.
Por otro banda, el interior del edificio está construido con un contraste de colores muy visible, para que sea más viable identificar las diferentes zonas de la biblioteca. Las cristaleras que separan estas zonas se combinan con madera para que sea más viable detectarlas y, así, los usuarios puedan aceptar de una sala a otra sin problema.
La accesibilidad se aplica todavía en los pequeños detalles, como las manetas de las puertas que son de palanca (más fáciles de activar) y tienen una forma ergonómica. Adicionalmente, están pintadas de un color diferente para que sea más viable encontrarlas.
El montacargas tiene puertas transparentes para proporcionar la comunicación con personas sordas o con discapacidad intelectual, y los ordenanza están en relieve y en braille. Este sistema de lección para personas ciegas todavía se ha utilizado en las puertas, enchufes, muebles y rotulación.
Una residencia para fomentar la movilidad
La Residencia Esclat Óleo alberga un conjunto de viviendas adaptadas para personas usuarias de sillas de ruedas. En ese sentido, la movilidad y la accesibilidad son fundamentales en la configuración del edificio: una rampa central conecta los distintos niveles de media planta en los que se distribuye la estructura arquitectónica. Esto permite que personas con limitaciones importantes puedan moverse por el edificio de forma autónoma.
El edificio alterna espacios de uso individual (los dormitorios) con espacios de uso colectivo (salones y comedores). De esta forma, los espacios colectivos se distribuyen por igual entre todos los usuarios.
La estructura de la rampa todavía favorece la conectividad visual. En empleo de tener tabiques o columnas que interrumpan la perspicacia, los diferentes tramos de la rampa se sujetan con una estructura metálica formada por nociones translúcidos, que dejan entrar la luz en el corazón del edificio. Al estar suspendida todavía permite establecer conexión visual entre diferentes niveles.
Por otro banda, en las habitaciones, las ventanas son horizontales y se establecen a 75 cm del suelo, para permitir la visibilidad de los residentes en arnés de ruedas.
Residencia Esclat Óleo en Barcelona. 
Un parque de niño donde todas las personas pueden poner
Los Jardines del Doctor Pla i Armengol, en Barcelona, son un tesina inclusivo que cumple con los criterios que deberían establecerse en todos los parques. El campo de acción de juegos infantiles, por ejemplo, facilita el repertorio inclusivo mediante una rampa de llegada global y tres toboganes a diferentes directiva, para que personas de todas las edades y capacidades puedan disfrutar.
El material utilizado en toda la estructura es alerce de montaña (Larix decidua), una madera natural sin ningún tratamiento químico que resiste perfectamente cualquier climatología. El parque cuenta con un columpio semillero, para que los más pequeños disfruten en compañía de amigos o familiares, e incluye una zona de juegos acústicos para comunicarse de punta a punta.
Otro de los grandes aciertos de este tesina es la combinación de pavimentos: de tierra, accesibles a personas con movilidad corta, y de arena, para aplanar caídas y con un detención valencia lúdico. La distribución de los espacios y nociones fomenta el contacto con la naturaleza, pero todavía la imaginación y la autonomía de niño.
Por posterior, los trabajos de reforma y rehabilitación de estos jardines priorizaron los espacios verdes en una ciudad tan densamente poblada como es Barcelona. Los accesos y caminos para recorrer el parque todavía son anchos y fácilmente transitables.
Jardines Dr. Pla i Armengol: un ejemplo de inclusividad y originalidad en el equipaje del parque de niño.
Centro educativo adaptado
El Institut Viladomat de Barcelona acoge a alumnado sordo en modalidad verbal. Así, desde el año 2016, este centro cuenta con alumnos con problemas de recital que se comunican oralmente y que siguen su escolaridad conjuntamente con otros alumnos. El objetivo es conseguir la plena inclusión de los alumnos en el centro.
Para proporcionar el llegada a la educación y avalar la igualdad de oportunidades, el alumnado sordo cuenta con unas medidas de atención a la heterogeneidad, como materiales didácticos adaptados y el apoyo de profesionales docentes especializados. Sin incautación, la edificación todavía puede ayudar en su ajuste.
En este caso, las instalaciones del Institut Viladomat todavía facilitan la comunicación entre las personas sordas: por ejemplo, el edificio está compuesto por grandes cristaleras que priorizan el contacto visual (el sentido de la perspicacia es fundamental para las personas sordas). De esta forma, si caminas por el pasillo, puedes ver todo lo que ocurre a tu en torno a.
Institut Viladomat de Barcelona
La Mecanismo Didáctica sobre edificación accesible y su importancia en la sociedad propone contenidos informativos y ejercicios para trabajar en clase. Cuenta con la colaboración de COAC.
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