¿Se imaginan ir conduciendo tranquilamente por la autopista y que, de repente, el volante del coche se descuelgue de la columna de dirección? Esto es lo que le sucedió el pasado 29 de enero al propietario de un Tesla Model Y escasamente una semana luego de acaecer estrenado el automóvil.
Prerak Patel utilizó las redes sociales para denunciar la peligrosa situación que vivió adjunto a su comunidad mientras viajaban por la autopista de New Elástica. “Por suerte no había nadie circulando detrás”, comentó con el nombre de afortunado @preneh24 en Twitter. Las condiciones del tráfico y su destreza le permitieron maniobrar para detener el coche en la mediana sin que se produjera ningún contratiempo.
Agentes del sección de policía de Woodbridge (Estados Unidos) acudieron al oportunidad, en la Ruta 1 Sur cerca de Garden State Parkway, para asistir al ciudadano. El coche tuvo que ser remolcado por una cabrestante, cuyo operario indicó a medios locales que el volante estaba en el regazo del conductor.
Según ha expuesto Patel en la plataforma social que pertenece a Elon Musk, incluso propietario de Tesla, en un primer momento la compañía automovilística le cobró 103,96 dólares (unos 96 euros al cambio) por la reparación del defecto. Sin duda, esto le sorprendió ya que se tráfico de un problema de fabricación. Tras manifestar su indignación, el concesionario le llamó para pedirle disculpas y le reembolsó el hacienda, pero en ningún caso pudo devolverle la confianza perdida.
El Tesla Model Y tiene una autonomía que oscila entre los 515 y 533 kilómetros
El cliente ya no puede conducir el transporte con tranquilidad, por lo que solicitó devolverlo y que le reingresaran el hacienda pagado por el coche. Sin confiscación, esta opción no forma parte de la política comercial de Tesla, que solo le ofrece dos opciones: cambiar su mecanismo poro otra igual totalmente nueva o quedarse la suya con un seguro específico. En presencia de esta alternativa, Patel decidió preguntar a los usuarios de Twitter qué harían en su caso. El resultado de la sondeo fue claro: el 83,4% cogerían uno nuevo. No ha trascendido cuál ha escogido.
Es habitual que las marcas hagan llamadas a revisión
De todos modos, la segunda opción siquiera garantiza al 100% que no vaya a tener este u otros problemas con su automóvil. Aunque no debería suceder, en poco más frecuente de lo que pensamos que los coches presenten algún sentencia que deba ser subsanado. De ahí que las marcas hagan llamadas a revisión de algunos ejemplares.
El problema del Model Y es que han sido numerosos los propietarios que se han quejado de la calidad y los defectos de producción que presentan. Por ejemplo, un afortunado explicó que su ejemplar tenía goteras, otro que perdió el techo mientras circulaba y otro que el asiento trasero no estaba adecuadamente anclado a su pulvínulo.
No es la primera vez que a un coche de Tesla se le descuelga el volante. Esto mismo le sucedió al propietario de un Model 3 con escasamente un mes de decrepitud. Por suerte, el percance, que incluso sucedió en marcha, no provocó ningún contratiempo.
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