Emmanuel Macron y Rishi Sunak han determinado este viernes la creación de un nuevo centro detención de migrantes irregulares en Francia, en la zona del canal de la Mancha. Durante la cumbre francobritánica celebrada en el Elíseo, se ha anunciado todavía que el Reino Unido pagará 480 millones de libras (unos 540 millones de euros) a Francia, durante los próximos tres primaveras, para contribuir a aumentar las medidas de vigilancia, en personal y tecnología, contra el tráfico de pateras. Una parte de este mosca irá destinado al nuevo centro de detención y al despliegue de 500 policías adicionales franceses en las playas del Paso de Calais.
Durante la rueda de prensa, Macron y Sunak se han esforzado en prodigarse buenas palabras mutuas y muestras de afecto, con la clara intención de dejar antes los primaveras de tensiones posteriormente del Brexit y mientras Boris Johnson y Lizz Truss ocupaban el número 10 de Downing Street. Los dos se han referido varias veces de "nuevo principio" en las relaciones. Los dos dirigentes se han abrazado dos veces. "Merci, mon ami", ha dicho el premier anglosajón tras su ingreso. Macron ha hablado conveniente inglés durante la rueda de prensa, como deferencia al huésped y para que su mensaje fuera nítido en presencia de los periodistas británicos presentes.
París y Londres intensificarán la cooperación en defensa y desarrollarán juntos nuevos misiles
La cooperación francobritánica en el inmediato futuro será muy intensa en materia de defensa y de energía. Los dos países quieren desarrollar nuevas armas como un misil naval y otro de crucero, así como sistemas de defensa antiaérea. París y Londres son conscientes de su papel como potencias nucleares y miembros permanentes -y por consiguiente, con derecho de veto- en el Consejo de Seguridad de la ONU. La compañía francesa EDF participará en la construcción de una nueva central atómica británica, el plan Sizewell C.
En el ámbito migratorio, tanto Macron como Sunak fueron esquivos a la pregunta de si Francia aceptará a migrantes devueltos de Gran Bretaña en virtud de la nueva ley, muy dura y polémica, que Londres prepara. La prioridad para entreambos es mejorar la lucha contra las mafias de traficantes y montar a un pacto entero en Europa para controlar los flujos.
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