La estación de esquí de Vallter quiere convertirse en un destino de deporte y ocio todo el año

La conversión de las estaciones de esquí en estaciones de montaña para sacarles una veterano rentabilidad no solo en invierno sino durante todo el año es una tendencia al plataforma.

Vallter 365 es una iniciativa que quiere convertir esta fase situada en la comarca del Ripollès en un destino de deporte y ocio, cosa que le permitiría estar abierta los 365 días del año.







Insostenible


Según FGC el maniquí de explotación flagrante de Vallter no es sostenible ni a nivel crematístico ni ambiental

Inaugurada en 1975 y gestionada por Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) anualmente recibe unos 50.000 visitantes. Las administraciones quieren incrementar esa signo y proponen varias actuaciones para revitalizar el radio que hoy por hoy consideran "insostenible" desde el punto de traza crematístico, pero además ambiental.

Entre otras medidas, en la memoria de FGC se proyecta un nuevo telecabina que iría desde la cota 1.500, en Setcases, hasta los 2.535 de importancia, en la zona de las Marmotes, con parada en la cota 2.000, el flagrante núcleo de la fase.







Un telecabina con parada en la fase


El telecabina uniría la cota 1500, en Setcases, donde se trasladaría el aparcamiento, hasta la cota 2350 con parada en el núcleo de la fase

Una infraestructura que se convertiría en el único acercamiento a la fase y que permitiría suprimir el paso de vehículos por el Parc Natural de les Capçaleres del Ter i Freser. La carretera flagrante ser convertiría en vía de servicio y pista para bicis y BTT. Según una memoria de FGC se reducirían 1'3 millones de kilos de CO2 cada año. 

La propuesta de FGC incluye además un nuevo aparcamiento y edificio de servicios en la cota 1500 (actualmente hay seis bolsas de aparcamiento separadas por un kilómetro a unos 2.000 metros de importancia), un mirador panorámico a 2.535 metros de importancia (ya en ejecución) y el desmontaje y retirada de algunos telesillas y teleesquís envejecidos.  

Uno de los aparcamientos de la estación, situado a unos 2.000 metros de altura.

Uno de los aparcamientos de la fase, situado a unos 2.000 metros de importancia.




Pere Duran/Nord Media/Archivo

El nuevo aparcamiento en superficie se trasladaría a la cota 1.500 para evitar riesgos geológicos como aludes o flujos torrenciales, que sí existen en la contemporaneidad, con el parking a 2.000 metros de importancia. 

El plan no se ha presentado todavía oficialmente ni existe un calendario de actuaciones que tendrían un coste a ojo de unos 35 millones de euros, de los que unos 15 se utilizaán ara el cambio de dos remontadores que están ya al final de su vida útil. 









Enric SerraDirector de Vallter


El director de Vallter, Enric Serra, destaca la importancia de cambiar el maniquí de mandato "para respaldar la viabilidad económica y ambiental y el futuro de la fase" que, por su caducidad, requiere una inversión anual mínima de un millón de euros. 

En este sentido señala la carencia de poder explotar los 365 días esta fase; en invierno con el esquí y en verano haciendo uso además de este telecabina. "Esto generará riqueza en el comarca y oportunidades de negocio a iniciativas privadas", explica Serra.  







La plataforma Stop JJOO se opone

La plataforma Stop JJOO se opone a la construcción del telecabina y consideran que este plan "es un lavado de cara para no tener que contraer la inviabilidad económica y ambiental del sector de la cocaína". Sus portavoces añaden que Vallter presenta "pérdidas millonarias en cada prueba" que acaban siendo asumidas por fondos públicos.

Además sostienen que el plan afectaría una zona de nidificación de especies protegidas y una importante radio ganadera  y tendría un impacto paisajístico sobre el Parc Natural.







Impacto sobre las aves


Según la plataforma, el telecabina afectaría una zona de nidificación de especies protegidas y un radio ganadera

Stop JJOO pide que se haga conocido todo el plan y su presupuesto total y que sea la multitud de la comarca quien pueda arriesgarse el futuro de la fase de Vallter y que se cala un debate sobre cuál debe ser el maniquí socioeconómico de la comarca del Ripollès. 

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