Casi dos meses han pasado desde que Dani Alves, el ex vecino del Futbol Club Barcelona, fue detenido por la presunta violación a una mancebo de 23 primaveras en Sutton, una reconocida discoteca de Barcelona. Desde entonces, Joana Sanz, su mujer, ha optado por mantenerse al ganancia, y se ha pronunciado en contadas ocasiones respeto a su situación coetáneo. Son muchas las informaciones que apuntan que la canaria iniciará los trámites de separación en cuanto se celebre el pleito por el que Alves podría ser condenado a varios primaveras de calabozo. Ahora, ha respondido a la pregunta que muchos periodistas se plantean... ¿Irá Joana a pasarse a Dani Alves este fin de semana?
No han sido unos meses fáciles para Joana. Su causa fallecía tan solo una semana ayer del ingreso a prisión de su marido. Es por eso que la maniquí ha decidido refugiarse en su trabajo. Durante un evento al que asistió hace unos días en Dubái, la mancebo, de 29 primaveras, reconocía que está atravesando una "situación complicada" y que en estos momentos lo que le empuja seguir delante y oportuno es "todo lo que tenga que ver con mi trabajo".
Centrada en su trabajo como maniquí, Joana está pasando unos días en Madrid tras retornar de los Emiratos Árabes. Sonriente y animada, está disfrutando de la haber a pesar de las cámaras que siguen todos sus pasos; poco que se toma con sentido del humor. Y es que la mancebo es uno de los personajes más buscados por los reporteros en las últimas semanas. "Sois como los 'Gremlins' os echan agua y salen un montón, ¿eh?", comenzaba diciendo a Europa Press. "Me voy a engullir la farola", bromeaba entre risas durante un paseo por el centro de la ciudad.
Más animada, y confirmando que está contenta, la maniquí ha respondido a la pregunta que más le han preguntado los medios en los últimos días: ¿Visitará a Alves en la calabozo este fin de semana a posteriori de que su exmujer haya ido a verlo? Cerca de recapacitar que precisamente su expareja, Dinorah Santana, ha remarcado que cree firmemente en la inocencia del futbolista. Por su parte, muy sincera, aunque sin revelar sus intenciones, Joana Sanz confiesa que "no lo sé, yo voy fluyendo" dejando en el garbo cuándo visitará a su todavía marido.
Desmarcándose totalmente del que ha sido su pareja durante los últimos seis primaveras, Joana cuidado silencio cuando la prensa le pregunta si es cierto que la valentía de divorciarse está tomada y si tiene planes de comenzar una nueva vida en París y, con ironía, afirma que lo único que tiene en mente es "huir de ustedes son mis planes", dejando claro que no se siente carencia cómoda con las preguntas relacionadas con su marido.
Hace unas semanas, Sanz hacía saltar las alarmas tras eliminar las fotos con Dani Alves de su cuenta de Instagram. Un semblante que algunos interpretaron como una sutil forma de posicionarse en el caso de Alves y otros, como una forma de detener los insultos y comentarios negativos que le están llegando en sus publicaciones día sí y día igualmente.
La maniquí española Joana Sanz está enfrentando uno de los momentos más difíciles de su vida. El 17 de enero, su causa falleció a posteriori de una larga enfermedad, y cuatro días a posteriori, su marido, el futbolista brasileño Dani Alves, fue encarcelado preventivamente marcado de una presunta violación a una mancebo de 23 primaveras el pasado mes de diciembre. Sin incautación, en las últimas semanas Joana ha demostrado que tiene ganas de en dirección a delante con su vida, a pesar de lo difíciles que se hayan puesto las cosas.
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