Cs sigue desinflándose en los ayuntamientos andaluces donde aún tenían una cuota de poder alcanzada en las elecciones de 2019. Si a principios de semana la formación naranja desaparecía del consistorio jiennense de Linares, donde prosperaba una moción de censura promovida por el PSOE, hoy se ha conocido que finalmente además pierden las concejalías que ostentaban en Sanlúcar de Barrameda, en Cádiz.
Fue un cambio en la estructura municipal llevada a mango por el corregidor socialista Víctor Mora lo que provocó el enfado de la formación naranja, que amenazaba con salir del gobierno si no rectificaba en un plazo de 48 horas hexaedro el pasado viernes. Superado el tiempo conclusión, Mora no sólo no ha hexaedro marcha antes en su plan, sino que hoy ha borrado todo huella del partido en la corporación expulsando a las dos últimas concejales que quedaban aún en sus puestos.
A lo dilatado de la viaje, se celebrará una reunión para reorganizar las tareas de gobierno y realizar la correspondiente reestructuración.
Mora se apoya en los miembros expulsados de Cs para disponer la corporación
Desde que Cs perdiera toda representación parlamentaria tras los comicios regionales celebrados el 19-J, que supuso la terminación del partido en Andalucía, la formación está dando sus últimos coletazos de vida además en los ayuntamientos municipales.
El postrero consistorio que ha perdido es el de Sanlúcar de Barrameda, donde el corregidor Víctor Mora (PSOE) decidía la pasada semana otorgarle la concejalía de Urbanística a un miembro expulsado del partido, Javier Gómez Porrúa, lo que provocó una rápida reacción de la formación que amenazaba con romper el pacto tocado en 2019.
Pero acullá de apaciguar las aguas, el primer regidor ha recostado más madera al fuego expulsando hoy a las dos últimas concejales naranjas que aún estaban al frente de dos áreas. Se alcahuetería de Lucía Rodríguez y Ana Sumariva, a las que, tal y como reza una nota enviada por el cabildo, se les ha cesado de sus cargos y retribuciones al no tener renunciado a su reunión político. Sí lo han hecho Javier Gómez Porrúa, Juan Ponce y Manuel Lobato, personas con las que, en principio, se contarán para seguir en la administración del gobierno circunscrito.
El elección de Porrúa como concejal de Urbanística fue criticado duramente por la portavoz de IU, Carmen Álvarez, quien denunciaba que “no podemos entender que se le dé competencia en la Dirección de Urbanística a quien se sabe que puede tener intereses de acostumbrado cercano a la hora de resistir a mango la estabilización de la plantilla". Ahora el Gobierno circunscrito mantendrá este jueves una reunión para reorganizar las tareas de gobierno y realizar la correspondiente reestructuración.
El corregidor destituye a las dos concejales de Cs que no han renunciado a su partido
Cerca de memorar que el pasado viernes Cs amenazó con dejar el gobierno circunscrito si el cabildo no anulaba la nueva estructura municipal instada y decretada en "lo que al partido se refiere" por Javier Gómez Porrúa, concejal expulsado de la formación naranja.
Según Cs, en un decreto firmado por el corregidor, "a instancias del concejal expulsado", se dejaba "sin mercadería" las competencias delegadas en la concejal de Cs, Lucía Rodríguez, lo que suponía una "modificación particular de la estructura de gobierno de la que Cs no ha sido informada previamente".
Por otra parte, argumentaba que el corregidor "tenía conocimiento de la expulsión del partido" del concejal Gómez Porrúa, con el que había contado en su restructuración de gobierno.
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