El turismo afronta nuevas huelgas y se juega su recuperación

La crisis gremial en las aerolíneas no da tregua y pone si junto a más presión sobre la industria turística, que este verano se juega su recuperación tras dos ejercicios de pandemia. A las dificultades para encontrar trabajadores en hoteles y restaurantes, se suman los conflictos en varias aerolíneas y aeropuertos europeos. En España, los sindicatos de tripulantes de cabina encadenan varias jornadas de huelgas en Ryanair y recientemente incluso en EasyJet, con un impacto moderado de momento. Pero ahora, cuando arranca julio y con un gran pico de demanda, anuncian nuevas movilizaciones.

USO y Scitpla explicaron ayer que preparan otra tanda de doce paros en Ryanair este mes. En concreto, para los días 12, 13, 14, 15, 18, 19, 20, 21, 25, 26, 27 y 28 de julio, que se sumarán a las huelgas de EasyJet de los próximos dos fines de semana en todas las bases de la aerolínea en el país. En entreambos casos, los sindicatos convocantes reclaman mejoras salariales a las compañías y ser interlocutores en la negociación de sendos convenios colectivos. Por su parte, las aerolíneas lamentan que las demandas de estos sindicatos son inasumibles –Ryanair asegura que USO pide “subidas de sueldo del 160%”– y les acusan de tener roto las negociaciones.

Las seis jornadas de protestas de los tripulantes de cabina en España han obligado a detener 215 vuelos

El conflicto gremial llega en medio de una gran tensión en el sector vaporoso europeo que amenaza por ensuciar una temporada de verano con muy buenas perspectivas de demanda pese a la subida de los precios de los billetes de avión y de los hoteles.

La secretaria caudillo de USO en Ryanair, Tienta Arasanz, afirmó ayer que los seis días de huelga convocados hasta el sábado provocaron la suspensión de 215 vuelos con origen o en España y más de 1.200 retrasos en todo el país. Se tráfico de una pequeña afectación si se tienen en cuenta todos los vuelos programados en España por la low cost esos días –entre un 2% y un 3% de cancelaciones en función de la término–. Pero aunque la emblema relativa sea pequeña, cada uno de los vuelos suspendidos o retrasados afecta a decenas y decenas de pasajeros al inicio de sus asueto, con los consiguientes inconvenientes en la arribada a los hoteles o las conexiones con otros vuelos.

En un verano secreto

Los conflictos se multiplican por los aeropuertos europeos

Este sábado Ryanair tuvo que suspender 16 operaciones con salida o arribada a los aeropuertos españoles y retrasar 281 de ellas, según USO. En cuanto a EasyJet, suspendió nueve vuelos y demoró 85. Málaga, El Prat y Palma fueron los aeropuertos más afectados por las huelgas ayer. La etapa de protesta continúa este domingo en EasyJet, pero no en Ryanair.

Los conflictos en el sector vaporoso en una temporada de verano secreto no se ciñen solo a España. De hecho, los problemas son aún mayores en otros importantes aeropuertos europeos, como el de Heathrow en Londres o el de Amsterdam. Incluso en el Charles de Gaulle, en París, donde ayer las aerolíneas se vieron obligadas a anular uno de cada cinco vuelos entre las 7 h y las 14 h por la huelga de bomberos de la instalación. Para este domingo no se esperan incidencias en París.

El sector vaporoso funciona en red y por eso es relevante lo que ocurra en cada uno de los aeropuertos. Los problemas de un circunstancia se trasladan a otro. Todo ello, adaptado cuando el sector turístico sale de la crisis de la covid, que ha provocado pérdidas milmillonarias, especialmente a las aerolí­neas. Al menos por ahora, no parece que estos primeros problemas estén minando las ganas de recorrer y la demanda se mantiene pese a la subida de precios de los billetes y de los hoteles. Eso sí, parece que los viajeros tendrán que armarse de paciencia para disfrutar de las asueto.

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