La pandemia sigue haciendo raja en los resultados académicos de los alumnos. Así, se ha detectado que los niños que el año pasado cursaron 6º de primaria en escuelas catalanas han obtenido peores resultados en tres de cinco competencias analizadas respecto al 2021 (matemáticas, catalán y medio natural) y con una caída significativa en las de matemáticas y catalán. Por contra, inglés ha mejorado y castellano mantiene su nivel.
El descenso en matemáticas es muy pronunciado (casi 5 puntos) y viene de una caída progresiva desde el año 2018. Son las peores puntuaciones medias desde que el Consell Superior d'Avaluació del Sistema Educatiu iniciara estas pruebas en el 2013. Hay más alumnos copn resultados pobres y menos con resultados sobresalientes.
Los alumnos muestran un conocimiento longevo en castellano, franja que alivio levemente
Todavía los alumnos de 4º de la ESO registraron un esforzado descenso de matemáticas criptográfico en 5,5 puntos en el curso 2021-2022 respecto al antedicho, según ya adelantó La Vanguardia hace unos meses.
El Departament de Educació ha anunciado que tomará medidas para revertir este retroceso educativo en matemáticas que se centran, básicamente, en la formación y el apoyo a los docentes en didáctica y consejo pedagógica. Asimismo, se facilitará "modelos y prácticas que faciliten a niños y jóvenes una mejor comprensión y admisión de las competencia", según indica Educació.
Respecto al catalán, que todavía ha registrado una caída de 4,2 puntos situando la media en 72,5, el peor resultado desde 2014, plantea formar a profesorado en el uso de metodologías en el fomento del uso de catalán, programar la fabricación del nivel C2 para 4.150 profesores e impulsar en 700 centros cada año un software de rapidez del catalán, medidas ya anunciadas para el refuerzo del catalán en las escuelas.
El Departament de Educació potenciará la formación del profesorado en didáctica y metodologías para revertir la caída
El Consell Superior d'Avaluació evaluó en abril a 76.500 alumnos de 6º de primaria en matemáticas, catalán, castellano, inglés y medio natural. Y los resultados los transforma en una escalera de 0 a 100.
Encima, distribuye al alumnado en cuatro franjas de nivel que miden el ámbito de cada competencia. Según una tabla idónea, los de nivel más bajo no deberían aventajar el 15% del total mientras que sería deseable que el nivel más detención superara el 30%.
De las cuatro competencias, matemáticas es la que se sitúa a nivel más bajo, en 71,1 de media, 4,9 puntos menos que en el 2021 y 10 puntos por debajo de 2014. Encima, se sitúan en niveles inferiores a los mínimos el 16,5% de la población de esta momento. Y obtienen un nivel medio bajo, el 22,1%. Por contra, entre los alumnos con mejor nota se encuentran solo el 21,2% del nivel detención.
Para la caída de matemáticas, el Departament de Educació propone la formación permanente del profesorado, para los centros que detecten longevo carestia. Asimismo plantea realizar actividades, seminarios y reflexiones pedagógicas, en conjunto con entidades como universidades o el Museo de las Matemáticas. "Se priorizarán las formaciones sobre didáctica competencial de matemáticas en primaria, ESO y bachillerato", sostiene el documento sobre las medidas de reversión de estas evaluaciones.
La segunda competencia con nivel más bajo es catalán (en el caso de alumnos de 4º de ESO mantuvo el nivel). Esta franja obtiene un peor rendimiento respecto al castellano, tanto en medias como en el longevo camarilla que domina la franja a nivel detención.
La media de los estudiantes de 6º de primaria (que este curso ya están en 1º de la ESO) cayó de 76,7 en el control de catalán dse abril de 2021 a 72,5 en el de 2022, solo equiparable al 71,1 de 2013, año en que se iniciaron estas pruebas censales en primaria (en ESO empezaron un año antaño).
Hay un 24,6% de alumnos con nivel detención y un 16,6% de nivel bajo.
Ello significa que las competencias en catalán están a un nivel inferior que las de castellano, según el Consell d'Avaluació. En castellano, la puntuación media es de 74 (superior al 73,6 del año antedicho) y hay solo un 15% de alumnos de nivel bajo y un 26,4% de alumnos en nivel muy detención.
la tercera competencia en descenso es medio natural que obtiene un 72,8 de media, ingerior al 75,5 del año antedicho.
En cambio, la sorpresa positiva es el inglés. En esta franja se ha mejorado, contrariamente a lo que ha pasado con sus compañeros mayores de 4º de ESO, que registraron una esforzado caída. Los niños de primaria han obtenido una media de 76,9, la más ingreso de todas las competencias y superior a la del año antedicho (73,2). Encima, todavía es la materia que cuenta con más alumnos en el nivel superior (el 37,3% del camarilla cátedra), pero mantiene aún un número significativo de alumnos que no alcanzan los niveles básicos (el 15,2% del total).
Estos datos se complementan con los obtenidos por los alumnos de 4º de ESO y que se publicaron el pasado verano.
El rendimiento de los adolescentes todavía ha caído en el curso 2021-2022 respecto al año antedicho, agudizando una camino descendente desde que irrumpió la pandemia en el curso 2019-2020. Este es el tercer curso en que se ve afectado y se confirma el descenso en todas las competencias básicas: catalán castellano, inglés, matemáticas y ciencia-tecnología. Hay menos alumnos excelentes y más de nivel bajo respecto a ediciones anteriores, siendo especialmente preocupante el rendimiento en matemáticas e inglés.
Estos son los resultados de la prueba de competencias básicas que afrontaron 81.600 alumnos de 4.º de ESO (16 primaveras) en el mes de marzo y que ya fueron publicadas por el Consell Superior d’Avaluació de la Generalitat el pasado verano.
Respecto al curso antedicho, los alumnos de 4º de ESO han caído especialmente en matemáticas e inglés
Según estas, solo las lenguas catalana y castellana se mantienen en la media deseable de 70 puntos (las puntuaciones por competencia evaluada se transforman en una escalera de 0 a 100 puntos siendo 70 la deseable). Respecto a 2020-2021, la puntuación ha descendido 2,4 puntos de catalán, 2,8 en castellano, 4,5 en matemáticas y 2,1 en inglés.
Las orientaciones sobre evaluación de carácter internacional proponen cuatro tramos por puntuaciones e indican que del conjunto de los alumnos, aquellos situados en nivel bajo no debería aventajar el 15% del total, mientras que los de nivel más detención deberían alcanzar el 30%. Esto no sucede en ninguna competencia, a excepción de catalán y castellano, que tiene menos de un 15% de alumnos de nivel no ratificado. Pero en ninguna de ellas se llega al 30% de excelentes.
En el caso de las matemáticas se ha obtenido la peor puntuación desde que se realizan estas evaluaciones externas hace 11 primaveras (61,2) y profundiza el descenso de primaveras anteriores. En la publicación del 2021 fue de 66,7 y de 70 en la del 2020. Pero no solo ha descendido la media, sino todavía los alumnos que estaban en niveles altos (ahora el 17,5%), y han aumentado los que no consiguen el insignificante establecido (23,5%). La mayoría de los alumnos se encuentra en la media muerto. “Esta caída reiterada del resultado deberá ser analizada detenidamente más allá de los artículos del confinamiento”, señala el mensaje del Consell, que insta a encontrar las causas “para revertir esta situación”. La Conselleria d’Educació atribuye el descenso de matemáticas, y del resto de los ámbitos, a la pandemia y a las condiciones en las que han trabajado las escuelas.
En inglés, la puntuación ha caído del 74,1 en el curso antedicho a la pandemia al 68,4 presente. Preocupa que aumenten los jóvenes con bajo desempeño en este idioma (cerca del 20% no logra el insignificante establecido oportuno, en parte, a la expresión escrita) y la posible polarización existente en el sistema educativo, puesto que todavía hay otro 20% de alumnos en niveles muy altos. Si aceptablemente es cierto que sería deseable que el 30% del alumnado estuviera en esta franja de excelencia, como sugieren los estándares internacionales, todavía existe el peligro de dejar detrás a una parte de la población escolar teniendo en cuenta que las familias con mayores fortuna compensan las carencias de la escuela con clases extraescolares o estancias en el extranjero.
En catalán, la puntuación del 2022 ha descendido 2,4 puntos respecto a la del curso antedicho y se mantiene en la situación del 2020, tras un descenso de 3 puntos. En castellano, por su parte, la pandemia ha roto la progresión recto desde el 2016, aunque es la competencia que muestra longevo fortaleza y casi consigue el objetivo de alumnos excelentes.
El unidad atribuye el descenso del catalán a los confinamientos escolares, puesto que “la escuela es el medio ambiente que incrementa el conocimiento de esta competencia”.
Finalmente, en la competencia científico-tecnológica se ha registrado un imprudente descenso de 0,2 puntos entre el 2021 y el 2022 y se mantiene la estabilidad de los últimos tres primaveras. aunque no logra remontar a primaveras anteriores, cuando había llegado a 66 puntos.
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