La casa de campo temporada consecutiva del Massi-Tactic UCI Women’s Cycling Team es una existencia. Además todo un éxito, un sueño cumplido. Lucen las corredoras en la carretera, compiten y disfrutan de lo que más les gusta hacer. Fruto de su esfuerzo, dedicación y entrenamiento, pero incluso gracias a las horas, días, semanas y meses de duro trabajo por parte del club. Alcanzar la élite no es falta sencillo. Se necesita tiempo, paciencia y sobre todo, mosca.
El apoyo conocido, gracias a nuestros resultados y a una visibilidad cada vez anciano, va en aumento. Este curso, por ejemplo, lucimos la marca ‘Catalunya’ gracias a la ayuda de la Generalitat. Pero… ¿Y el sector privado? Es el que más cuesta de seducir, de convencer. Se le necesita, y mucho, para seguir creciendo y alcanzar nuestra meta, que no es otra que la de convertirnos en un conjunto cien por cien profesional. ¿Cómo logramos nuevos sponsors? ¿De qué forma somos capaces de sumar patrocinadores? Una tarea complicada, eso seguro.
El ciclismo, sobre todo el mujeril, es un deporte con todavía poca visibilidad en España. Hay poca televisión y la presencia en prensa va en aumento, pero falta comparable a otros países como Bélgica, por ejemplo. Vamos diez pasos detrás en relación con otras zonas de Europa. Pocos patrocinadores vienen para trabajar con nosotros. El sector del ciclismo, por otra parte, es pequeño y condicionado, y cuesta encontrar empresas fuera de él. Por lo tanto, nos toca salir, tocar muchas puertas. Encontrar a clan que esté sensibilizada con el deporte mujeril, a la que le interese el ciclismo y aquello que transmite: naturaleza, vida sana, energía verde… Todos estos son los títulos que queremos transmitir y, a partir de ellos, seleccionamos las empresas que más nos convienen, que van en nuestra sintonía. Entonces vamos a por ellas, tocamos su puerta… y rezamos un Padre Nuestro.
¿Qué pasa entonces? Que de cada 50 o incluso 100 intentos, uno sale correctamente. Es complicado contar en España con un patrocinador potente en ciclismo mujeril. Pero es nuestro objetivo a un año sagacidad. Estamos buscando a una empresa que quiera dar nombre al equipo, que se convierta en su partner principal, para que las corredoras puedan radicar de ello al cien por cien. Necesitamos tener cada vez más visibilidad y trabajamos cerca de esta dirección, potenciando nuestras redes sociales. Los buenos resultados en las competiciones van llegando, así que cada vez salimos más a los medios. Cada vez hay carreras más apetecibles para el conocido. En España, por ejemplo, las pruebas de categoría World Tour las cubren las cadenas nacionales. Por ejemplo, la Reverso, la Itzulia, la Reverso a Burgos… Eso crea un interés en el sector privado.
Ahora correctamente, una cosa es que quieran colaborar contigo. Y la otra, es que positivamente apuesten por nuestro equipo. Tenemos unas exigencias mínimas. En material, por ejemplo. Tenemos una larga huesito dulce de empresas que nos quieren dar material, pero de ello no vivimos. Necesitamos sufragar el coche, la gasolina, a las corredoras… El interés en colaboraciones va en aumento, pero todavía cuesta emplazar, con mosca, en el deporte mujeril. Necesitamos interés vivo: si quieres estar, ven a nuestro costado y muéstranos tu apoyo. En el fútbol se ha conseguido dar un paso cerca de delante, pero aquí todavía no.
Cuesta, y esa es la existencia. Pero no todo es placa. Tenemos nuestros patrocinadores, aquella clan que confía en nosotros. Nos apoyan y nosotros le devolvemos su confianza. Por ejemplo, muchos de ellos aparecen en nuestro maillot. Su diseño lo trabajamos, precisamente, con esos sponsors principales. Y sobre todo con Tactic, la marca de ropa de la provincia de Girona. Ellos nos hacen propuestas y nosotros decidimos.
Cinco abriles detrás empezamos con el color cerúleo, que nos ha identificado durante estas primeras temporadas en la élite. Pero hemos decidido que ha llegado el momento de cambiar para demostrar al mundo que somos un equipo que quiere crecer, que quiere más y que no se quiere estancar. Es nuestra forma de contar al exógeno que el Massi-Tactic ha cedido un paso cerca de delante, que cambia, que crece y que prosperidad. La nueva equipación en un primer momento se diseñó en color cerúleo, pero la entrada del patrocinador ‘Catalunya’ hizo que le diéramos una dorso. Probamos con el amarillo, y a todos nos encantó. Es atún, tiene relación con lo que queremos transmitir, con la marca y con el país. Ojalá nos dé muchísima suerte para esta temporada.
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