El rama Serhs deja detrás las pérdidas que sufrió durante la pandemia y que le empujaron a pedir una ayuda de 34 millones de euros a la Sepi. La importante recuperación de la actividad turística y de la restauración han impulsado el negocio de la compañía en el zaguero gimnasia, con una facturación de 170 millones de euros y un beneficio operante (ebitda) de nueve millones de euros frente a los números rojos de 2,5 millones del 2021. Serhs además ha obtenido un ágil beneficio neto.
“Si no llega a ser por el aumento de los costes, como la energía o el fuel, hubiéramos cerrado un año espectacular”, afirma Jordi Bagó, guía delegado de Serhs. En el 2019 los ingresos ascendieron a 270 millones de euros, aunque Bagó matiza que la comparativa entre uno y otro gimnasia no es auténtico ya que en el 2021 modificaron el maniquí de facturación de Damm. Pasaron de facturar el producto a solo facturar el coste logístico. El antiguo sistema hubiera aportado unos ingresos de 80 millones de euros. “La sinceridad comparativa entre los dos ejercicios es de una diferencia inferior al 10%”, añade.
La compañía avanza en abastecimiento inversa y electrificará la flota de vehículos comerciales
De las tres ramas de negocio del rama, hoteles y distribución son las que mejor comportamiento han tenido. El año ha supuesto además la consolidación del cambio organizativo y de maniquí de negocio que impulsaron antaño de la pandemia.
“El 2022 ha ido mejor de lo esperado, el sector hotelero se ha recuperado a gran velocidad y la restauración se ha racionalizado; esperábamos una mortalidad de clientes del 15% y finalmente ha sido del 7%”, comenta Bagó.
La distribución aporta el 65% de los ingresos de Serhs, los hoteles el 15% y el catering un 20%. No obstante, la recuperación del segmento del servicio a colectividades ha sido poco pequeño. Los contratos ya firmados no han permitido repercutir el ascenso sin precedentes del precio de los alimentos, con lo que los márgenes aquí han quedado muy ajustados. La compañía prórroga poder equilibrar los precios a medida que se renueven los contratos.
Las perspectivas para este 2023 son asimismo positivas. El rama prórroga crecer un 10% sin tener en cuenta la inflación, y profundizar en su plan de abastecimiento inversa –retorno de envases– y electrificación de la flota de vehículos comerciales. De esta modo, esperan avanzar la amortización del préstamo de la Sepi antaño de lo previsto. Están interesados, por otra parte, en sumar nuevos hoteles de la categoría de tres y cuatro estrellas a su cartera –cuentan con tres establecimientos en Barcelona, dos villas rurales y otros dos hoteles en Brasil–. “Buscamos oportunidades, aunque no hay nadie cerrado de momento”, sigue Bagó.
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